- Un año para salvar mi vida, que se estrena esta noche en Documentos TV, es la historia del biólogo George McGavin durante el año en el que convivió con un melanoma mortal. La inmunoterapia y la terapia dirigida son dos de los últimos avances científicos, de los que cada vez se benefician más pacientes con cánceres letales.

A George McGavin le diagnosticaron un melanoma letal. “Es incomprensible que una mutación en una única célula de uno de los talones pueda llegar a matarte en un año. Hace poco me han dicho, que estoy en la fase tres, lo que significa que el cáncer se ha expandido a los ganglios linfáticos”, relata este biólogo.

Los novedosos fármacos, sumamente específicos, van directos a tratar las mutaciones de las células malignas de un tumor, sin apenas afectar a las sanas.

Este tratamiento oncológico revolucionario, denominado terapia dirigida, junto a la pionera inmunoterapia están consiguiendo resultados sorprendentes. “La gente tiene que saber que un cáncer no es una pena de muerte, que los que llegaban a los tres o cuatro años, probablemente lleguen ahora a los quince, veinte o más”, incide el biólogo molecular y premio Nobel Jim Alison.

Como George McGavin, muchos otros pacientes se están beneficiando ya de estos últimos avances científicos de la investigación oncológica. “Hace diez años no se podía hacer absolutamente nada”, dice el protagonista de esta historia. “He tenido la mala suerte de sufrir esta enfermedad, pero por fortuna la he tenido ahora”.