Des-Kontrol apunta a una "facción" de Herri Norte como responsable de la paliza sufrida el viernes

Donostia. Los miembros del grupo Des-Kontrol emitieron ayer un comunicado donde aclaran algunos puntos sobre la agresión que sufrieron el viernes en Barakaldo antes del concierto que iban a ofrecer durante las fiestas del barrio de San Vicente. El grupo de Arrasate quiere que "la gente sepa lo que de verdad ocurrió" y por ello ofrece de nuevo su versión de los hechos y apunta como responsables a "una facción" de Herri Norte, peña del Athletic de Bilbao. "Esto no tiene nombre y pronto decidiremos cómo responder. Des-Kontrol no tiene nada en contra de Herri Norte, pero sabemos con seguridad que los que nos atacaron son una facción. La agresión está en los juzgados", afirman.

La cronología de los hechos se remonta a "dos o tres semanas atrás cuando unos desconocidos se dirigieron a la comisión de fiestas de San Vicente pidiendo que suspendieran el concierto de Des-Kontrol". Los organizadores decidieron mantener la cita en el programa y advirtieron al grupo de lo ocurrido.

Durante el día del concierto "unas 50 personas" se acercaron y ellos pensaron que "sólo querían provocar". "Se dirigieron a uno de nosotros y antes de nada le dieron con una barra de hierro en la cabeza. A continuación, nos hicieron lo mismo al resto. Eran unos cincuenta, algunos encapuchados, con barras de hierro, botellas, puños americanos... Fue todo muy rápido y estaba muy bien planificado. Después supimos que había más gente en la otra entrada al recinto para atacarnos o ayudarles", explican en la nota.

En el hospital se encontraron con "cuatro o cinco jovencitos a los que también habían agredido". " Queremos mandarles nuestro apoyo y a sus familias, y les invitamos a que se pongan en contacto con nosotros".

En palabras del grupo los médicos que les atendieron les advirtieron de que "los golpes iban dirigidos a hacer el mayor daño". "Uno tiene ocho puntos en la cabeza; otro cuatro y una herida en la cadera; un tercero tiene dos puntos en la cabeza, un golpe en la nariz y moraduras en ojos y dedos; un cuarto tiene la mano rota, heridas en el cuello y oreja y golpes en la espalda; y el quinto tiene golpes en todo el cuerpo. Queremos que la gente sepa lo ocurrido, nosotros no tenemos nada que justificar. Nuestra actitud y compromiso lo mostramos en el día a día. Lo que es injustificable y hay que juzgar es la actitud de estos agresores", concluyen.