Donostia. Tras una Vuelta al Bidasoa de sangre, sudor y más lágrimas y golpes al manillar que sonrisas, a Bidelan-Kirolgi le tocó ayer recoger la cosecha a la siembra en los entrenamientos. Faltó la guinda, pues Jon Garate fue segundo tras Andrés Vigil (Andalucía) en el accidentado sprint del Memorial Inguanzo, pero la escuadra guipuzcoana se impuso por equipos en la clásica cántabra, lo que le permitió anotarse la Copa de España, en un palmarés en el que solo figuraban dos equipos vascos: Kaiku (1999) y Baqué (2000 y 2002). Por otro lado, Ugaitz Artola logró un éxito de prestigio en la Subida a Urraki.

El triunfo individual fue para Fran Moreno (Caja Rural), por delante de Jesús Ezquerra (El Soplao). El cántabro fue décimo al ganar el sprint del pelotón y el oscense, undécimo, por lo que le sobraron dos puntos para el alirón. El Memorial Inguanzo se decidió en las dos últimas vueltas de las cuatro que debían dar a un circuito con la subida a Ubiaco, cuando saltaron doce ciclistas, entre ellos Garate y David Gutiérrez (Bidelan) y Cristóbal Sánchez (Seguros Bilbao). En la siguiente, Garate rompió el grupo, que se quedó en los siete que se la jugaron en un sprint en el que los tres primeros Vigil, Garate y Jesús del Pino (Caja Rural) se iban al suelo sobre la misma raya. El azkoitiarra solo sufrió las habituales heridas de guerra. "Me hubiera alegrado mucho por Jon si hubiera vencido, pero el gran objetivo en la salida era ganar la Copa de España valora su director, Jon Odriozola. Los chavales han entendido que, por encima de las individualidades, nuestra fuerza es el equipo. Por eso, superar en la competición que reúne a los mejores ciclistas y equipos, es muy importante para un equipo como el nuestro. No somos los mejores, pero la unión de todos nos permitió ganar".

Artola, en Urraki Ugaitz Artola sumó ayer su segundo éxito de 2011 ganó el Campeonato de Gipuzkoa elite, al vencer en la siempre atractiva Subida a Urraki. El de Villabona, que como Garate no sobresale por su punta de velocidad, superó en la última rampa al holandés Paul Kneppers (Caja Rural) y al argentino Gastón Agüero (Latorre). Los tres eran parte de una fuga gestada antes de iniciar la ascensión junto al navarro Martín Iraizoz (Lizarte) y al ibartarra Xabier Iriarte (Belca). O.O.G.