NO estuvo presente, por voluntad propia, en el Palacio de Congresos de París, pero su nombre fue el más pronunciado en todos los corrillos. Alberto Contador fue el protagonista ausente en la presentación del recorrido del Tour de Francia de 2011. Su suspensión provisional después de que se encontraran restos de clembuterol en un control de la pasada ronda gala, la investigación abierta para certificar si su coartada de la contaminación alimentaria es verídica y la amenaza de sanción que pende sobre su cabeza capitalizaron todo tipo de comentarios, tanto entre los propios ciclistas -"el caso de Alberto no es dopaje ni mucho menos", afirmó Samuel Sánchez; "espero que Contador sea inocente y que pueda probarlo. Que esta historia termine rápido porque es malo para el ciclismo, para él, para todos nosotros", añadió Andy Schleck- como entre directores y mandatarios del ciclismo.
Uno de los más contundentes en sus declaraciones fue Pat McQuaid. El presidente de la Unión Ciclista Internacional (UCI) aprovechó la cita para salir a la palestra y negar cualquier trato de favor con respecto al ciclista de Pinto. "La UCI no trata de cubrir a Contador. Desde el principio hemos seguido las reglas y trabajamos con la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), con la que tenemos contactos diarios. No protegemos a nadie. La lucha contra el dopaje es un aspecto muy importante para la UCI", enfatizó. Cuestionado sobre la razón por la cual el corredor no haya recibido una sanción inmediata por los restos de clembuterol hallados en su organismo durante el Tour, el irlandés, que hizo hincapié en el hecho de que cualquier decisión que se tome sobre Contador se hará de forma conjunta con la AMA, explicó que "el hecho de que fuera una pequeña cantidad de clembuterol complica los estudios. Sabemos que el clembuterol es positivo aunque sea poco, pero queremos saber cómo esa pequeña cantidad llegó ahí. El ciclista dice que fue por una contaminación alimentaria. Es una posibilidad, pero tenemos que estudiar si es buena. No sé cuándo llegaremos al final. Los expertos de la AMA y la UCI están trabajando todos los días en este caso. No podemos acelerar el proceso, no podemos avanzar sin la AMA y sin sus expertos. Tenemos que esperar. Me apena que no tengamos ya una conclusión, pero hay que dejar trabajar a los expertos".
Donde sí fue tajante McQuaid fue en su convencimiento de que en el deporte español existe un problema de dopaje, aspecto éste que, según él, le han reconocido las propias autoridades del país, aunque a última hora de ayer el Consejo Superior de Deportes y la Agencia Española Antidopaje negaron este hecho mediante un comunicado. "Me telefonearon y aceptaron que hay un problema de dopaje en España y prometieron colaborar para mejorar las cosas. Pero no es la primera vez que digo esto. Lo dije y lo creo", señaló, ejemplificando su opinión con la defensa realizada desde varios frentes en el caso de Ezequiel Mosquera, segundo clasificado de la última Vuelta que dio positivo por hidroxietil. "El ex ciclista Fernando Escartín dijo que Mosquera es un gran campeón y que la UCI está matando el ciclismo. Con esa actitud no es una sorpresa que haya un problema en España".
"Sospechoso no es culpable" Tampoco obvió el caso Contador Christian Prudhomme, director del Tour de Francia, que se mostró cauto a la espera de la decisión que tomen los organismos pertinentes. "Esperamos las conclusiones de la AMA y de la UCI. Lo único que podemos decir es que deseamos que la espera no dure demasiado. Sería inaceptable no esperar esas conclusiones", indicó, al tiempo que quiso recalcar que "sospecha no quiere decir culpabilidad. Hay que esperar las conclusiones de los organismos habilitados", los cuales, según Prudhomme, tienen un asunto muy complicado entre manos. "Si fuera algo sencillo, no estaríamos escuchando a los expertos decir cada día una cosa y lo contrario".
Tampoco el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, quiso perder ayer la oportunidad de ofrecer su punto de vista sobre toda la polémica que rodea al caso del corredor de Pinto, aunque éste no lo hizo desde la capital francesa, sino en una entrevista concedida a Telemadrid. "Espero que todo se solucione lo antes posible, porque todo esto hace daño a Contador, al ciclismo y al deporte español. Yo no sé cómo acabará el caso, pero es una lástima que no pueda estar en la presentación del Tour por un tema que tiene sus connotaciones muy específicas. Hay que esperar y ser respetuosos para saber qué ocurre".