Las canas son uno de los signos más evidentes del envejecimiento capilar, aunque pueden aparecer a cualquier edad. Su presencia suele generar dudas, preocupaciones estéticas y, sobre todo, muchos mitos.

El color del cabello está determinado por la melanina, un pigmento producido por los melanocitos situados en los folículos pilosos. Con el paso del tiempo, la producción de melanina disminuye, haciendo que el cabello pierda su color y adquiera un tono blanco, gris o plateado.

Aunque el envejecimiento es el principal factor, existen otros motivos que pueden adelantar la aparición de las canas:

  • Genética: El factor hereditario es determinante. Si los padres o abuelos encanecieron temprano, es probable que ocurra lo mismo.
  • Estrés: Aunque no es la causa directa, el estrés crónico puede afectar la salud de los folículos y acelerar el encanecimiento.
  • Déficit nutricional: La carencia de ciertas vitaminas y minerales, como la B12, el hierro, el cobre y el zinc, puede influir en la salud capilar.
  • Enfermedades autoinmunes: Algunas condiciones, como el vitíligo o problemas de tiroides, pueden estar asociadas con la aparición temprana de canas.
  • Factores ambientales: La exposición a la contaminación, el tabaco o la radiación ultravioleta puede dañar los folículos y contribuir al encanecimiento.

¿Arrancar las canas hace que salgan más?

Este es uno de los mitos más extendidos. Arrancar una cana no provoca que salgan más en su lugar. Cada cabello crece de un folículo individual, por lo que arrancar uno no afecta a los demás. Sin embargo, arrancarlas repetidamente puede dañar el folículo, generando posibles infecciones, debilitamiento del cabello o incluso que deje de crecer en esa zona.

Por lo tanto, si bien no aumentará el número de canas, es una práctica que conviene evitar para no perjudicar la salud capilar.

Las canas son parte del envejecimiento natural de las personas, aunque se puede retrasar su aparición Freepik

Trucos para retrasar las canas

Aunque no se puede detener por completo el proceso natural de encanecimiento, ciertos hábitos pueden ayudar a mantener el cabello sano y retrasar la aparición de las canas:

  1. Alimentación equilibrada: Consumir alimentos ricos en vitaminas del grupo B, especialmente B12, así como hierro, zinc y cobre, contribuye a la producción de melanina.
  2. Reducir el estrés: Practicar técnicas de relajación como el yoga, la meditación o el ejercicio regular ayuda a minimizar los efectos del estrés sobre el organismo.
  3. Evitar tóxicos: Reducir el consumo de tabaco y la exposición a contaminantes ambientales beneficia la salud del cuero cabelludo.
  4. Cuidado capilar adecuado: Utilizar champús suaves, evitar el uso excesivo de productos químicos y proteger el cabello del sol ayuda a conservar su vitalidad.
  5. Remedios tradicionales: Algunas personas utilizan aceites naturales como el de coco, amla (grosella india) o romero, que, según la medicina ayurvédica y la tradición popular, fortalecen el cabello y pueden retrasar la aparición de canas.

Un proceso natural

Las canas forman parte del proceso natural de la vida, pero comprender sus causas y desmentir ciertos mitos puede ayudarnos a afrontarlas con más tranquilidad. Es importante saber que no existe una fórmula mágica para evitar su aparición, unos hábitos de vida saludables pueden retrasar su llegada y mantener el cabello en óptimas condiciones durante más tiempo.