donostia. No va más en el San Sebastián Arena. Después de siete derrotas consecutivas, cuatro de ellas en casa, al Lagun Aro GBC se le ha acabado el margen de error y está obligado a ganar hoy en su cancha al Menorca (12.30 horas) en "el partido más importante de la temporada", según han dicho los propios protagonistas. La necesidad es máxima: por un lado, hay que poner punto final a la dinámica negativa y, por otro, hay que derrotar al equipo menorquín, penúltimo clasificado, para no complicarse el futuro.

Nadie esperaba estar con apuros a estas alturas, pero mes y medio sin ganar ha hecho que el Lagun Aro ya esté a cuatro triunfos de la zona del play-off -convirtiendo cualquier objetivo ambicioso en utopía- y con solo dos sobre la zona de descenso, que precisamente ocupa el visitante de hoy, el Menorca. La diferencia entre ganar o perder, por tanto, es abismal. Ganar supondría aventajar al Menorca en tres victorias más el average (los de Laso ganaron en la primera vuelta por 87-96), es decir, supondría tener la salvación en el bolsillo a falta de catorce jornadas. Perder, en cambio, desataría una crisis de consecuencias inimaginables, porque supondría la octava derrota consecutiva y el margen sobre el descenso quedaría en una victoria. Es decir, para bien o para mal, el choque de hoy marcará la temporada.

Más presión incluso tiene sobre sus espaldas el Menorca. El equipo que entrena Paco Olmos está teniendo un difícil regreso a la ACB. Solo ha ganado cinco partidos en lo que va de temporada y sabe que si pierde hoy se le escapará un importante tren hacia la permanencia. Su situación en la tabla no es casual, porque la plantilla menorquina es bastante justa. Sus cinco titulares -Ciorciari, Limonad, Victor, Radenovic y Donaldson- absorben casi todo el juego porque el banquillo no ofrece grandes alternativas. Especialmente peligroso es Donaldson, un pívot muy atlético que ha sido con diferencia el mejor jugador de la LEB los dos últimos años. En la ACB, como es lógico, es más irregular, pero habrá que atarlo en corto.

recuperar sensaciones Para evitar sustos e imponer su mejor plantilla, el Lagun Aro debe saltar a la cancha con, al menos, la misma intensidad que su rival desde el minuto uno, con una buena defensa y cerrando el rebote, algo que no ha logrado hacer en demasiados partidos. A partir de ahí, Salgado, Baron, Doblas y compañía tienen que recuperar la confianza y ofrecer su mejor versión. Si los hombres importantes funcionan, la victoria no se puede escapar. Y si hay momentos de debilidad, la afición deberá tomar la palabra. Ganar es la única opción porque el Lagun Aro es mejor.