Tres detenidos por el intento de atraco de la sucursal del Santander en Irun

En el intento de robo en Irun de marzo, los autores practicaron un butrón para acceder al banco. Al llegar los empleados y ser descubiertos desistieron de su propósito.

Según explica la Ertzaintza en su nota de prensa, "desde días antes al 24 de marzo, los autores habían comenzado a preparar el butrón o agujero que les diera acceso a la entidad bancaria situada en el Paseo Colón de Irun. El butrón se encontraba en un sótano en obras de un inmueble adyacente con entrada desde la calle Luis Mariano. La pared era de hormigón armado, cuyas varillas de hierro habían sido cortadas para permitir el paso a través de las mismas".

La mañana de autos, pasadas las 7:00 horas los primeros empleados de la sucursal accedieron a sus puestos de trabajo y observaron el butrón, desde donde asomaba "el brazo de una persona que empuñaba un arma corta, una pistola. Al verse sorprendidos, los ladrones desistieron de sus intenciones y huyeron del lugar sin lograr su cometido. Inmediatamente, la Ertzaintza recibió el aviso en su Centro de Mando y Control de la tentativa de atraco en la citada sucursal".

La Ertzaintza activó entonces un dispositivo que le llevó a rastrear el edificio céntrico, así como puntos del entorno, ante la posibilidad de que los atracadores pudieran haberse escondido. El centro de Irun permaneció cortado durante horas por un operativo en el que participaron patrullas de Protección Ciudadana de la Ertzain-etxea de Irun, otros recursos de intervención de la Policía vasca y de respuesta inmediata, además de la Policía Local de Irun.

• Vídeo: así accedió la Ertzaintza a la sucursal del Santander atracada en Irun

Sin éxito en los primeros pasos de la investigación, "el caso pasó a manos del Servicio de Investigación Criminal Territorial de Gipuzkoa (SICTG)".

Con el paso de las semanas las pesquisas se centraron en tres personas, "con diversos antecedentes delictivos, y en concreto una de ellas con un perfil de especialista en atracar bancos. Se trataba de un hombre, de 65 años de edad, con un historial policial y penal por delitos de robo con violencia en entidades bancarias. El avance de la investigación determinó que los dos acompañantes y coautores de los hechos eran otros dos hombres, residentes en Gipuzkoa, fichados por la policía; uno de ellos con antecedentes por robo con violencia y tráfico de drogas, con ingresos en prisión por estos hechos. Al segundo cómplice identificado también le constaba un historial delictivo por robos, agresiones y lesiones, entre otros delitos".

Hasta que llegó el momento de las detenciones, entre el 16 y el 19 de noviembre. Tras los arrestos y "bajo la supervisión de la autoridad judicial", las y los agentes efectuaron varios registros en viviendas, donde se pudieron obtener diversas evidencias y se ocupó una pistola simulada.

Los tres detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Irun correspondiente, que ha dirigido la instrucción e investigación del caso.