El juicio por la causa principal contra José Juan Cabezudo, más conocido como Kote Cabezudo, ha comenzado este lunes en la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa, donde finalmente no ha declarado el fotógrafo. Las cuestiones previas planteas por las partes han ocupado la primera de las jornadas, y se ha producido un giro inesperado: La suspensión en la Audiencia de Gipuzkoa de la vista oral hasta este martes, a la espera de que el tribunal evalúe, entre otras, una prueba documental presentada a última hora por la defensa en relación a una serie de contratos de trabajo del fotógrafo con una de las víctimas.

Así, tras casi nueve años de instrucción, el fotógrafo donostiarra, en prisión preventiva en la cárcel de Martutene desde 2018, responderá este martes por su presunta implicación en delitos de índole sexual cometidos contra 17 de sus modelos durante más de dos décadas.

La apertura del juicio oral ha despertado enorme expectación, con la acreditación de una veintena de medios de comunicación, plataformas de apoyo a las víctimas y fotógrafos en la parte trasera de la Audiencia de Gipuzkoa a la espera de captar la imagen del acusado.

Las cuestiones previas planteadas por las partes han ocupado la primera de las jornadas. Tanto el Ministerio fiscal como la acusación particular han señalado que la aportación de prueba documental requerida por la defensa en el mismo acto de juicio oral resulta “extemporánea” debido a la imposibilidad de contrastar en el mismo día la validez de esos contratos.

“Cabe recordar que el acusado ya ha sido condenado por aportación de documentación falsa en procedimientos judiciales previos”, ha indicado en los pasillos de la Audiencia Mario Díez, letrado de la acusación particular, que ha solicitado al tribunal un plazo de 24 horas para contrastar esa prueba documental con la víctima a la que representa.

NUEVOS TESTIGOS

La Sala, que preside el magistrado Augusto Maeso Ventureira, deberá pronunciarse este martes también sobre la proposición de nuevas pruebas presentadas por las acusaciones. “Entendemos que hay tres testigos que son fundamentales en cuanto a la acreditación de la producción de pornografía infantil por parte de Kote Cabezudo. Una de ellas, la única al margen de las víctimas, refiere tener conocimiento de ese extremo, y hemos reiterado su testifical”, ha señalado Díez.

El inculpado ha accedido a la sala a las 10.00 horas acompañado por su abogado, Eneko Olano. Durante el trámite de las cuestiones previas, la acusación particular ha solicitado otra prueba testifical en relación a uno de los episodios que sufrió otra de las perjudicadas, “que es acreditativo del acoso que el señor Cabezudo ejercía sobre las víctimas que formulaban denuncias”.

En último extremo tambien ha solicitado que comparezca un tercer testigo que habría ejercido un papel de mediador “dentro de esa desesperación que tenían las víctimas, que en muchas ocasiones pasaba por intentar negociar con Kote Cabezudo la retirada de las fotografías”, ha señalado.

La fiscalía, a su vez, se ha opuesto a la adminisión de unos catálogos sobre trabajos fotográficos que ha presentado el acusado. “No son relevantes porque lo que se demuestra es una fotografía difuminada y velada, cuando aquí de lo que estamos hablando es de material pornográfico crudo. Entendemos que no puede establecerse un término de comparación”, ha señalado el fiscal Jorge Bermúdez.

En esta jornada, se ha conocido que el fotógrafo donostiarra, acusado de abusos sexuales y distintos delitos de índole sexual contra 17 de sus modelos, no responderá a las preguntas del abogado de la acusación particular, Mario Díez.

La Fiscalía pide para Cabezudo 121 años y medio de cárcel, mientras que esta petición se eleva a 2.338 años por parte de la acusación particular.