Gipuzkoa ha registrado 28.577 positivos por coronavirus en la última semana, lo que supone mantener la fuerte tendencia creciente de todo el mes de diciembre al superar en casi 12.000 casos el registro de la semana anterior. En cuanto a la tasa de incidencia acumulada a 14 días, también sigue al alza, al pasar de 3.298 a 6.287 casos por 100.000 habitantes.

Los picos de positivos identificados en las últimas tres semanas hablan bien a las claras de la evolución de la pandemia en Gipuzkoa: entre el 16 y el 22 de diciembre, fue este último día el que más positivos diagnosticados dejó (1.699). Las dos semanas siguientes, el 29 de diciembre (4.686 positivos) y 31 de diciembre, 4.731 casos, marca de una pandemia que en las últimas semanas se ha llevado por delante la trascendencia de la palabra récord.

Los datos de los próximos días indicarán si el menor número de casos diagnosticados en el nuevo año (por encima de la media de la semana anterior) son la antesala de un descenso de contagios y si en cuanto a número de positivos la sexta ola ha tocado techo entre el 29 y el 31 de diciembre, siempre por encima de los 4.000 positivos diarios. Aun así, la prudencia manda en semejante escenario, ya que el 4 de enero ha vuelto a dejar una cifra que supera los 4.000 casos registrados.

Junto a esto, que afecta de lleno a la Atención Primaria, conviene atender al grado de hospitalizaciones para entender la dimensión completa de la situación, aunque a diferencia del comienzo de la pandemia, Osakidetza solo ofrece del conjunto de la CAV. Así, según estos datos eran 455 las personas ingresadas en planta el 29 de diciembre (115 en las UCI vascas), frente a las 631 actuales en planta y 122 en UCI tras un descenso desde el día 3 (132 personas ingresadas).

Las próximas semanas serán claves en los hospitales, ya que se empezará a notar el impacto real de la variante ómicron en el sistema hospitalario. En otras palabras, si es menor que el de la variante delta en personas vacunadas como sostienen algunos científicos en pleno debate académico que aún no tiene respuesta, lo que permitiría un cierto respiro una vez los ingresados por la variante delta van saliendo de los hospitales.

Pese a que las consecuencias en una persona vacunad sean menores, el reto no es individual, sino de toda la sociedad, ya que pese a que un porcentaje menor de contagiados requiera ahora de atención médica, si el número de casos está multiplicado con respecto a las anteriores olas, tensará el sistema sanitario de la misma manera.

En un escenario en el que la pandemia sigue en expansión y con pocos síntomas de frenar el ritmo pese a las medidas aprobadas en las últimas semanas, una de las pocas noticias positivas es el número reproductivo básico, que en Gipuzkoa cae desde el pasado 30 de diciembre, cuando tocó techo con 1,7 y ahora se sitúa en 1,2. Conviene recordar de que solo si este indicador se sitúa por debajo de uno se empieza a considerar que la transmisión del virus empieza a reducirse.

Por municipios

En el mapa municipal, las ciudades más pobladas del territorio encabezan la clasificación, con los 6.279 casos que ha identificado Donostia, seguida de Irun (2.454) y Errenteria (1.484). Por detrás se sitúan Arrasate (1.208), Eibar (1.033), Tolosa (929), Bergara (893), Zarautz (774), Azpeitia (763), Hernani (726) y Hondarribia (679).

En el otro lado de esta clasificación se encuentran municipios como Arama, Baliarrain y Zerain, con cuatro casos cada uno; Leintz Gatzaga (3), Beizama (2) y Gaintza (1). Frente a lo que sucedió en otras fases de la pandemia que comenzó en marzo de 2020, no hay ningún municipio de Gipuzkoa sin positivos en esta última semana.