DONOSTIA - GHK, el consorcio de residuos de Gipuzkoa, ha abierto un expediente sancionador a Ekondakin, la empresa concesionaria del complejo medioambiental de Zubieta, que integra la incineradora. La causa de esta decisión es el vertido tóxico que se produjo la pasada semana en la regata de Arkaitzerreka, provocando la muerte de un número indeterminado

de peces.

Esta vertido fue denunciado el fin de semana por vecinos de la zona, que atribuyeron su origen a la incineradora, conclusión a la que llegaron porque la regata discurre bajo el complejo y en los alrededores no existe ninguna otra construcción. Ayer, el órgano que preside el diputado foral de Medio Ambiente José Ignacio Asensio, hizo pública una nota en la que informaba de que el vertido se produjo el jueves de la semana anterior sin que la empresa le hubiera informado del suceso. Lo hizo después de la investigación llevada a cabo por técnicos de GHK, que comprobaron el circuito cerrado de las aguas que utilizan las cuatroplantas del complejo (tratamiento mecánico biológico, incineradora, biometanización y tratamiento de escorias), así como los sistema de depuración, sin detectar ninguna anomalía.

En vista de ello, se preguntó a Ekondakin si sabía de alguna incidente que explicara el vertido. Finalmente, la concesionaria comunicó que el 7

de mayo, a primera hora de la tarde, "se produjo un derrame de amoniaco durante la descarga de una cisterna que estaba llevando a cabo un suministrador externo", se lee en la nota de GHK.

El consorcio de residuos ha informado de todo ello a la Dirección de Administración Ambiental del Gobierno Vasco, a la Agencia Vasca del Agua

(Ura) y a la Dirección del Medio Natural de la Diputación. Mientras, GHK ha abierto un expediente sancionador a la empresa por no haber informado del derrame y por los daños causados en el medio natural. En paralelo, Ura, que tomó muestras en el lugar el día en el que se

denunció el hecho, también está investigando lo ocurrido así como analizando la composición del agente tóxico.