avarra Suma, la coalición que agrupa a UPN, Ciudadanos y PP, se ha incorporado al carro de los que pactan con EH Bildu. Más allá de que la coalición de derechas mantenga como recurrente monotema y como ariete político la crítica hacia quienes acuerdan con “los que todavía no han condenado el terrorismo de ETA”, lo cierto es que el grupo parlamentario que lidera Javier Esparza también firma pactos de calado con la izquierda abertzale.

El más reciente ha tenido lugar este jueves en el Parlamento foral, donde Navarra Suma y EH Bildu suscribieron de forma conjunta la enmienda que ilustra esta página y que mandata al Gobierno foral a que en el plazo de un año ponga en marcha la Agencia para la Transición Energética de Navarra.

Este acuerdo, además de la importancia que encierra en sí mismo por lo que supone crear un nuevo organismo público, tiene su relevancia política ya que no se trata de una mera coincidencia en el voto, sino de una iniciativa al alimón.

En todo caso, no es la primera vez que ambas formaciones van de la mano en el Parlamento. El 3 de abril de 2020, Navarra Suma consiguió aprobar una enmienda con el respaldo de EH Bildu para ampliar de 100 a 130 millones un fondo creado por el Gobierno foral para hacer frente al impacto generado por la crisis del covid.

Ese mismo día, a propuesta de EH Bildu y con el apoyo de Navarra Suma, se aprobó la creación de otro fondo extraordinario de 25 millones para paliar los gastos de las entidades locales asociados al coronavirus.

Ambos fueron acuerdos de los dos grupos de la oposición, que hicieron la pinza al Gobierno, y que en esta ocasión contaron con el insuficiente rechazo de los cuatro grupos firmantes del acuerdo programático para esta legislatura.

En definitiva, por mucho que los voceros de la derecha traten de deslegitimar a EH Bildu, la realidad es que los acuerdos de la coalición soberanista no se limitan a los alcanzados recientemente con los gobiernos de Navarra, España y la CAV para respaldar los respectivos presupuestos.