Sus promotores defienden que se trata de una herramienta eficaz para paliar la exclusión social en Euskadi. Otras voces hablan de “realismo mágico”, en la medida en que no acaban de ver claro el encaje de esta prestación, que sería abonada por la administración pública y que garantizaría 900 euros mensuales para todas las personas mayores de 18 años, trabajen o no.

La Iniciativa Legislativa Popular (ILP) por una Renta Básica Incondicional en Euskadi llega este jueves al Parlamento Vasco, donde esta proposición de ley será debatida tras recibir un incontestable respaldo social: 22.075 firmas, y la adhesión de 80 organizaciones.

Varias decenas de personas han secundado este martes sendas convocatorias en Donostia y Bilbao donde la Comisión Promototora de la ILP ha informado de los actos previstos durante esta semana después de meses de trabajo. Quieren que la propuesta no solo llegue a la cámara sino que sea tramitada como una ley ordinaria, aunque más allá de su recorrido legal, el debate parlamentario supone de por sí un éxito por la capacidad de movilización y convocatoria demostrado.

De hecho, el número de firmas logrado duplica al necesario legalmente para impulsar una ILP. Este jueves, a partir de las 9.30 horas, la promotora explicará en la cámara vasca las razones de esta iniciativa. Plantea “garantizar el derecho de toda la población a tener los recursos necesarios para el disfrute de una vida digna”, según han explicado este martes en rueda de prensa.

ASIGNACIÓN "PÚBLICA E INCONDICIONAL"

La Renta Básica Incondicional se presenta como una prestación monetaria pagada por las administraciones públicas que "permitiría cubrir las necesidades básicas". Es decir, una asignación económica "pública e incondicional" a toda la población. "Es incondicional porque la percibes tengas otros ingresos o no los tengas, trabajes en el mercado laboral o no lo hagas, estés en situación de pobreza o no. No es una renta para quien sufre la pobreza, sino que la percibe toda la ciudadanía", detalla Manoli Etxeberria, integrante del grupo motor que desde el pasado mes de septiembre ha impulsado en Gipuzkoa esta iniciativa popular

La promotora, que anima a la ciudadanía a participar en diferentes actos, ha organizado un autobús que partirá a las 7.30 horas este jueves desde Anoeta en dirección Gasteiz, donde está previsto instalar una carpa frente al Parlamento Vasco en la que se manifestarán en favor de esta iniciativa diferentes movimientos sociales que se han adherido a la propuesta. “Ha llegado el momento de explorar otras vías. Los subsidios condicionados no han sido capaces de acabar con la pobreza económica. Es momento de implantar nuevos modelos, de ampliar los derechos sociales”, defiende la promotora.

La iniciativa se presenta en una comunidad como Euskadi, que cuenta con el modelo más desarrollado y generoso de lucha contra la pobreza, al menos desde el punto de vista presupuestario, basado en una renta mínima condicionada, la RGI (Renta de Garantía de Ingresos), que llega en la actualidad a más de 54.000 hogares.

Los promotores entienden, no obstante, que tres décadas después del actual modelo es necesaria una revisión para dotarse de nuevas herramientas con las que combatir la pobreza. “Se trata de si se quiere o no se quiere. Se trata de voluntad política”, defiende la promotora.