rimer día el de ayer de semivuelta a la normalidad laboral con decenas de mascarillas disponibles en la calle pero pocos empleados yendo a sus puestos de trabajo. "Estamos aquí desde las 6.30 horas y nos van a sobrar tantas que no sé si merece la pena que volvamos mañana -por hoy-", contaban los voluntarios de la DYA, encargados del reparto de las protecciones en cinco puntos repartidos por Donostia.

En una jornada laboral normal los Topos de Euskotren que se acercan minutos antes de las 9.00 horas a la plaza Easo van a rebosar. Sin embargo, los vagones que llegaban ayer iban con un número de pasajeros que se podía contar de un simple vistazo. Frente a las canceladoras les aguardaban varias voluntarias de la DYA y cajas con parte de las 162.000 mascarillas que se repartirán en dos jornadas en Gipuzkoa. "Está viniendo gente a cuentagotas. Se nota que todavía mucha gente no trabaja o lo hace desde casa. Pero las personas que vienen cogen las mascarillas que les damos", contaba una voluntaria.

Y así era. Casi la totalidad de las personas que se bajaban de los trenes se hacían con una de las protecciones a pesar de no saber muy bien cómo debían ponérselas. "Lo que es azul hacia fuera y la nariz y la boca deben ir tapadas", le señalaba una voluntaria a un hombre.

"Sabía que hoy hacían el reparto y, como trabajo en el cuidado de personas mayores, he cogido una, que me vienen muy bien", afirmaba Catalina, una vecina donostiarra. Itxaso, por su parte, una joven también de la ciudad, aprovechaba que tenía que comprobar los nuevos horarios de los trenes para hacerse con una: "Voy ahora al autobús y me la pienso poner; creo que es más seguro así".

"La gente está concienciada y se la pone. Muchas personas incluso vienen con ellas puestas que han cogido de otros puntos del territorio", explicaban desde la DYA.

Los voluntarios de la asociación se repartieron ayer por diferentes municipios de Gipuzkoa como Arrasate, Lasarte-Oria, Eibar, Beasain, Zumarraga, Villabona, Andoain y Hernani, mientras que Protección Civil hizo lo propio en Ordizia, Tolosa, Irura, Zarautz, Pasaia, Errenteria, Hondarribia e Irun.

En Donostia, además de en la plaza Easo, estuvieron en la estación de Renfe, en el Boulevard y en la plaza Gipuzkoa, donde la afluencia de trabajadores era la misma que en la estación de Topo.

"Hay más gente que va a hacer la compra que a trabajar. A este ritmo van a sobrar muchas mascarillas", apuntaba Irene, voluntaria de la DYA.

Mascarillas artesanales

"Todos deberíamos llevarlas"

Buena parte de los pasajeros en el día de ayer llevaban ya sus propias mascarillas. Algunas quirúrgicas, otras compradas en farmacia y algunas hasta artesanales, como la de una mujer que esperaba al autobús para ir a Errenteria y teletrabajar en casa de sus padres. "Me he hecho una yo misma mirando tutoriales en Internet, porque era imposible conseguir una", comentaba, señalando que no obstante había cogido una que le ofrecía la DYA para "ir más normal y parecer otra cosa".

José, un médico que se dirigía a un ambulatorio, optaba por llevar una de las mascarillas a las que tiene acceso en su trabajo: "La mía supuestamente es mejor que las que están dando, que son de un solo uso, pero son necesarias y todos deberíamos llevarlas puestas, sobre todo para estar en sitios cerrados como el transporte público".

"La mía es de farmacia, ya que soy limpiadora en los Padres Carmelitas y allí hay personas mayores que son vulnerables y es peligroso", contaba Maite, recién llegada a la estación de Donostia y que creía que todos, sin importar qué trabajo tienen, "deberían llevarla por los demás".

DYA y Protección Civil volverán a realizar repartos de mascarillas hoy desde las 6.30 hasta las 10.00 horas en los mismos puntos que ayer.

"Todos deberíamos llevarlas puestas para ir en sitios cerrados como el transporte público"

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