Ginebra/Berlín. La Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó ayer que la bacteria intestinal E. coli Enterohemorrágica (EHEC) puede transmitirse de persona a persona a través de las heces o por la vía oral. "Este tipo de transmisión nos preocupa y por esta razón quisiéramos que se refuercen los mensajes relativos a la higiene personal", declaró la epidemióloga de la OMS, Andrea Ellis.
La especialista señaló que por el momento todos los casos detectados "están relacionados con el norte de Alemania", de modo que se cree que la exposición a la extraña bacteria, que inicialmente se atribuyó a pepinos españoles, "está limitada a ese área". Sobre las vías de transmisión, explicó que el contagio "puede ocurrir sin una higiene adecuada", por lo que una medida de prevención eficaz es lavarse las manos tras ir al baño y antes de tocar los alimentos.
Alemania, país en el que se concentran la mayoría de afectados (2.000), pidió ayer comprensión a los españoles por su actuación ante el brote de E. coli, mientras el número de muertes confirmadas por la virulenta variante de la bacteria intestinal aumentó a 18 en este país, más otra en Suecia. "Pido de nuevo a la población española comprensión para la actuación de las autoridades alemanas implicadas que hicieron lo que tenían que hacer", señaló la ministra de Agricultura y Defensa del Consumidor alemana, Ilse Aigner. Destacó que "el desarrollo es dramático" y que desde hace más de una semana el país registra nuevos casos de enfermedad y muerte.
De momento, trece países ha informado de casos de afectados por el SUH y la peligrosa variante de la bacteria intestinal E. coli: Alemania, Austria, Dinamarca, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Holanda, Noruega, Reino Unido, República Checa, Suecia y Suiza.
El equipo bacteriológico de la Clínica Universitaria Eppendorf de Hamburgo, ciudad de la que partió la alerta sanitaria y también la retirada de pepinos españoles del mercado, informó el jueves de la identificación del genoma de la peligrosa variante de E. coli, un cruce hasta ahora desconocido de bacterias.
Entre tanto, los médicos confían en una nueva terapia para los enfermos con el anticuerpo Eculizumab, del que, sin embargo, se desconoce su eficacia y sus posibles efectos secundarios. Por ahora ya se ha podido determinar que el germen patógeno es resistente a antibióticos como la penicilina y a la cefalosporina.