Volver a los orígenes, al Km0, de la mano de Culinary Zinema
‘Back to the south’ propone un regreso a la raíces en la sección con más sabor del Zinemaldia, que se complementa con las exitosas cenas temáticas del Basque Culinary Center
Limpieza, mimo, amor, sencillez… Cuchillos, morteros, ollas, prensas… Pero, sobre todo, una mirada tranquila y reposada a un viaje de vuelta, el de Lin Shanshan a su tierra, a sus orígenes, al sur de China.
Vuelve, lo dice la propia protagonista de Nan fang nan fang/Back to the south, para “comer bien”, harta de las frías cajas de alimentos que se lleva a la boca en una también fría oficina de Beijing. Pero vuelve también para recuperar su pasado y conectarlo con el futuro, transformando la casa en la que vivió con la abuela que la crío, ante la ausencia de un padre y una madre dedicados al trabajo, en una posada con corazón; un corazón situado en la cocina, a donde llegan los productos de la tierra, la de sus ancestros, que corta, pica y cocina con utensilios desconocidos para gran parte del público donostiarra. Con pocos ingredientes y mucho cariño.
Y es en la cocina y alrededor de la misma donde ocurre todo, de forma tranquila, con una cámara que se mete en el puchero, en el wok. Es el escenario en el que Shanshan conoce y comparte las cuatro historias de los huéspedes que van pasando por su hospedaje, historias de reencuentros, de búsquedas e, incluso, de despedidas.
El director de Back to the south, película que se incluye en la sección Culinary Zinema que el Zinemaldia propone de la mano del Basque Culinary Center, Xiao Haiping, lo subrayaba antes de la proyección de la cinta: esta es la historia de una vuelta “al campo, a los orígenes a la naturaleza”. Una historia que va hilando otras historias más chiquitas a través de “una antigua poesía”, que da la bienvenida a cada nuevo huésped.
Este año las películas que se presentan a la sección gastronómica del certamen donostiarra aspiran a un premio de 10.000 euros
Pero, además, destacó Haiping, esta película quiere ser también una ventana abierta a la gastronomía china, a los paisajes del sur del país, a sus gentes… Esta película, junto al resto de las que pueden verse en esta sección, será candidata a los 10.000 euros de premio con los que se reconoce al trabajo mejor valorado.
La receta del Culinary Zinema es sencilla y exitosa: cine+cena. Cada noche, tras la proyección, las afortunadas personas que han logrado conseguir el tique para disfrutar de un menú muy vinculado con la temática de la película, se desplazan hasta el Basque Culinary Center donde, además, se lleva a cabo un pequeño diálogo con los embajadores de cada una de las cintas.
Tras la proyección de la propuesta china, el menú fue elaborado por Martina Puigvert, que en el restaurante Les Cols de La Garrotxa pone en valor los productos que cultiva en su propia huerta. Alumni del BCC, Puigvert fue adquiriendo tablas en diversos restaurantes de prestigio antes de tomar las riendas de la cocina del restaurante familiar.
Junto a ella en los fogones estuvo Carlos Casilla, del Barro de Avila, que abrió sus puertas a inicios de 2023 con un equipo joven que pretende trasmitir la herencia gastronómica y cultural de la zona a través de su producto y de la forma de trabajarlo.
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