El vestido de novia de Tamara Falcó se ha convertido en objeto de debate nacional. La marquesa de Griñón se mostró ayer bastante enfadada en la tertulia de ‘El Hormiguero’, donde colabora, con la firma que iba diseñar su traje.

La firma bilbaína Sophie et Voilà emitió esta misma semana un comunicado en el que renunciaba a diseñar el vestido Falcó. "Lamentablemente, el acuerdo entre Sophie et Voilà y la señora Falcó para la confección de su vestido de novia ha tenido que ser resuelto como consecuencia del incumplimiento contractual por parte de la señora Falcó", indicó.

Ayer Tamara quiso explicar lo sucedido. “Empezamos con estas diseñadoras y yo tenía en mente un vestido que había visto hace un montón. Todo comenzó cuando le recomendé uno a mi hermana y a ella no le gustó”, comenzó diciendo.

Tamara pretendía que las diseñadoras vascas se inspiraran en ese vestido, algo que no les hizo mucha gracia. "Todo se volvió muy feo", confesó Tamara cuando Sophie et Voilà le mostró el diseño que habían preparado sin acordarlo, según Tamara. "Yo no me iba a casar con un vestido que no me gustaba", sentenció.

La marquesa quiso además salir al paso de los rumores que apuntaban a que había cobrado por llevar el vestido. "Yo tenía un contrato de imagen con ellas durante un año, prolongable a dos. Yo no pagaba el vestido de novia, solo cobraba por el contrato", aclaró.

Finalmente, todo quedó en manos de sus abogados . "Tengo muy buenos abogados que pusieron que si no me gustaba el vestido no tenía que casarme con él. Y al final todo se empezó a torcer. Mi madre me preguntó si me gustaba y dije que 'no'. Y lo siguiente es el comunicado de prensa".