El Gobierno alemán anunció ayer que ha vuelto a expulsar a criminales afganos a su país, una medida que no aplicaba desde agosto de 2021 y que afecta a “delincuentes convictos que no tenían derecho a permanecer en Alemania y contra los que se habían dictado órdenes de expulsión”. Se trata de un total de 28 criminales, según explicó una declaración de la ministra del Interior, Nancy Faeser. “Alemania deporta hoy a Afganistán a 28 criminales. Nuestra seguridad importa, nuestro Estado de Derecho actúa”, dijo Faeser en unas declaraciones transmitidas por su ministerio.

Crimen en Solingen

El anuncio de las expulsiones, hecho público en un primer momento por Steffen Hebestreit, portavoz del Gobierno de Olaf Scholz, se produjo apenas una semana después del atentado que dejó tres muertos en la ciudad de Solingen y tras el cual el Ejecutivo ha presentado nuevas medidas para endurecer la política migratoria. “Hoy, Alemania devolvió a nacionales afganos a su país de origen por primera vez desde agosto de 2021”, indicó Hebestreit en un comunicado.

Olaf Scholz EP

“El interés de Alemania por la seguridad prevalece claramente sobre el interés por proteger a delincuentes y personas peligrosas”, señaló el comunicado del portavoz del Ejecutivo germano, que la víspera presentó un paquete de medidas con el que Berlín pretende endurecer las políticas de inmigración y seguridad.

Dicho paquete fue la reacción del Gobierno de Scholz al atentado con cuchillo que dejó tres muertos la semana pasada en Solingen perpetrado por un ciudadano sirio que hubiera debido ser deportado con anterioridad y que juró lealtad al grupo yihadista Estado Islámico (EI).

Hebestreit señaló al aludir en su comunicado a los inmigrantes afganos sobre los que pesan condenas y órdenes de expulsión que “en los últimos meses, el Gobierno Federal ha realizado grandes esfuerzos para reanudar los retornos en estos casos y ha apoyado a los Estados federados responsables a tal fin”.