Las tendencias en materia de decoración de interiores están en constante evolución. Atrás quedaron los paredes con gotelé, los suelos de azulejo o las lámparas antiguas.

Existen numerosas opciones que se amoldan a todos los gustos. En el ámbito de la iluminación, hace unas décadas lo habitual era tener las clásicas lamparas colgantes. Hoy en día, la decoración suele ser más minimalista, ya que el ambiente no está cargado.

Por ello, la mayoría de la gente ha puesto focos en los techos de su pared, dado que son la opción más moderna y eficiente.

Sin embargo, también existen algunas lamparas que se amoldan a la perfección con la decoración moderna de la época y que pueden combinar a la perfección con los focos LED.

Uno de los mejores ejemplos son los apliques de pared de Leroy Merlin, que por 9,85 euros ofrecen un diseño cilíndrico que emana modernidad y estilo.

Fabricado en aluminio de alta calidad, este aplique ofrece la versatilidad de iluminar tanto hacia arriba como hacia abajo, convirtiéndolo en una opción ideal para pasillos, entradas, habitaciones y zonas de paso.

Es perfecto para añadir un toque de luminosidad y decoración a tus espacios.

Aplique de pared de Leroy Merlin

Aplique de pared de Leroy Merlin Leroy Merlin

Diseño interior

La iluminación del hogar ha dejado de ser un aspecto puramente funcional para convertirse en un elemento esencial del diseño interior.

Hoy en día, la luz no solo cumple la misión de iluminar los espacios, sino que también define su carácter, estilo y atmósfera.

Las nuevas tendencias en decoración y eficiencia energética invitan a repensar la forma en que usamos la luz, buscando equilibrio entre estética, confort y sostenibilidad.

Una buena iluminación transforma por completo cualquier estancia. La luz cálida genera ambientes acogedores en salones y dormitorios, mientras que la luz fría resulta ideal para zonas de trabajo o cocinas.

La tendencia actual se centra en la iluminación por capas, que combina luz general, puntual y ambiental para crear espacios más dinámicos y versátiles. Además, los diseños minimalistas y las luminarias de líneas simples ganan protagonismo, integrándose discretamente en la arquitectura y aportando un toque contemporáneo.

En paralelo, la eficiencia energética se ha convertido en un criterio clave. Las bombillas LED han sustituido casi por completo a las tradicionales, reduciendo el consumo hasta en un 80% y ofreciendo una vida útil mucho más larga.

Asimismo, los sistemas inteligentes de iluminación, controlados por voz o aplicaciones móviles, permiten regular la intensidad y el color de la luz, adaptándolos al momento del día y optimizando el gasto energético.

Estado de ánimo y la productividad

Elegir una iluminación adecuada no solo mejora el bienestar visual, sino que también influye en el estado de ánimo y la productividad.

Una casa bien iluminada transmite armonía y refleja la personalidad de quienes la habitan. En definitiva, la iluminación moderna combina diseño, tecnología y conciencia ecológica, convirtiéndose en una herramienta fundamental para crear hogares más eficientes y llenos de vida.