La Ertzaintza se ha incautado de 14 kilos de cocaína, que hubieran alcanzado en el mercado un valor de un millón de euros, en uno de los vehículos interceptado en el operativo antidroga desplegado el pasado lunes en Lezo en el que fueron detenidas tres personas, que han ingresado ya en prisión.
En el transcurso del operativo, la Policía Vasca llegó a efectuar dos disparos "intimidatorios" cuando uno de los traficantes trató de huir, aunque no se registró ningún herido, según informó el Departamento vasco de Seguridad.
Un convoy hasta Donostia
La misma fuente ha detallado este viernes que la investigación, llevada a cabo por el Servicio de Investigación Criminal Territorial de la Ertzaintza en Gipuzkoa, se inició hace varios meses cuando la Policía vasca tuvo conocimiento de que un vecino de Donostia traficaba con droga y recibía cocaína desde el sur de la península.
Los agentes encargados de la investigación sospechaban que la cocaína iba a ser transportada en un vehículo equipado con un habitáculo preparado al efecto y que iba a llegar hasta Donostia en convoy con otro vehículo que hacía las labores de lanzadera.
El pasado lunes, los responsables de la investigación detectaron el vehículo que trasladaba la droga hasta Gipuzkoa, por lo que se estableció un dispositivo para que fuera interceptado en Lezo.
Huida de película
En el transcurso del operativo, al recibir el alto de los agentes a la altura de la rotonda de Altamira, que distribuye los tráficos entre Lezo y Errenteria, el conductor que transportaba la droga trató de escapar arremetiendo con su vehículo contra varias patrullas policiales y contra los agentes que se encontraban a pie, quienes se vieron obligados a realizar varios disparos para evitar ser arrollados. El vehículo acabó golpeando una farola y se vivieron momento de tensión en la huida del con conductor que, posteriormente, fue detenido.
Al mismo tiempo, la Ertzaintza arrestó en las cercanías al conductor del otro vehículo que al parecer hacía de lanzadera.
Poco después, los agentes detuvieron a un tercer implicado, acusado igualmente de tráfico de drogas, en una vivienda ubicada en la misma zona y que supuestamente era el destinatario de la droga.

En el registro del vehículo siniestrado, los ertzainas encontraron en un habitáculo bajo los asientos delanteros los 14 kilos de cocaína.
Un habitáculo escondido en el coche
Además de la cocaína, los agentes encargados de la investigación localizaron en el domicilio del tercer detenido unos 10.000 euros, una envasadora al vacío y material informático.
El valor de la cocaína incautada, que iba a ser distribuida tanto en la CAV como en Iparralde, sería aproximadamente de un millón de euros una vez puesta a la venta en el mercado minorista, ha precisado la fuente.
Los tres arrestados fueron puestos este jueves a disposición de la autoridad judicial, que decretó su ingreso en prisión.
La Ertzaintza mantiene abierta la investigación y no descarta nuevas detenciones.