José Luis Polo, socio fundador y director de Okados, analiza las tensiones del mercado inmobiliario en Gipuzkoa y reivindica una manera de trabajar basada en la transparencia, la responsabilidad y la información veraz.
Desde su experiencia, ¿cómo describiría la situación actual del mercado inmobiliario en Gipuzkoa? ¿Se perciben síntomas que hagan pensar en una nueva burbuja o la realidad es distinta?
El mercado inmobiliario de Gipuzkoa y especialmente el de Donostialdea está pasando por un periodo de máxima tensión. El alza de precios continuado en los últimos dos años, la escasez de oferta y la ansiedad con la que se enfrentan los compradores al mercado está elevando la tensión entre la oferta y la demanda. El acceso a la vivienda se está convirtiendo en uno de los problemas más graves a los que se enfrentan los guipuzcoanos en su vida cotidiana.
¿Qué cree que estamos haciendo mal como sector o como sociedad? ¿Dónde están las oportunidades de mejora?
La vivienda es un problema para el que no hay soluciones mágicas. ¿Qué hemos hecho mal? La vivienda es uno de los pilares básicos del Estado del Bienestar, junto con la Sanidad, la enseñanza pública y las pensiones. Dejar la satisfacción de vivienda en manos del mercado ha sido un error que estaremos pagando muchos años. El mercado inmobiliario es diferente al resto de mercados de bienes y servicios, y ha demostrado que no tiene ninguna capacidad de autorregulación. ¿Dónde está el problema? Tenemos unos precios excesivamente altos para la capacidad adquisitiva de los ciudadanos. Tenemos una escasez de oferta, pero no podemos deducir directamente que tenemos una escasez de viviendas; Donostia tiene la ratio de habitantes por vivienda más baja de Donostialdea y es la ciudad más tensa del Estado. ¿Si se construyeran miles de vivienda bajarían los precios de forma significativa? Mi opinión es que no. Se necesitarían más medidas como controlar la finalidad a la que se van a destinar estas viviendas.
Okados se ha consolidado como una referencia en el sector inmobiliario de Gipuzkoa. ¿Qué diría que les diferencia y qué valor añadido aportan frente a otras agencias?
Algo tan poco comercial como la transparencia. Creo que tanto el comprador y el vendedor tienen derecho a conocer los términos en los que se desarrolla la compraventa o el alquiler. Nos creemos responsables de que una compraventa sea consciente e informada.
Hablan de “compra consciente e informada”. ¿Cómo trasladan esa filosofía a la práctica en el día a día con sus clientes?
Trabajando las condiciones técnicas del inmueble, las obligaciones fiscales, la normativa urbanística que le afecta y haciéndolas transparentes a los clientes.
En un sector a veces cuestionado, ¿cómo se materializa ese compromiso con la transparencia en la forma de trabajar de Okados?
Con información clara y veraz a disposición que quien va a hacer la inversión más importante de su viva o va a vender una parte de su patrimonio. Información sin ocultaciones ni interpretaciones tendenciosas.