Los primeros ponentes coincidieron en destacar el cambio de percepción que ha experimentado la FP en los últimos años, pasando de ser una alternativa secundaria a convertirse en una primera opción para muchos jóvenes.
“Cuando yo estudiaba, la FP tenía poco prestigio. Hoy, sin embargo, es cada vez más atractiva. Es una alternativa real a la universidad, y los datos lo demuestran: este curso hay cerca de 50.000 estudiantes matriculados en Euskadi, lo que supone un aumento del 9% respecto al año anterior, y un 30% más que hace diez años”, subrayó Eduardo Iribarren.
Territorio cohesionado y talento arraigado
El alcalde de Eibar, Jon Iraola, puso en valor el compromiso histórico de la ciudad con el conocimiento y la formación, y destacó la necesidad de evitar la fuga del talento joven: “Durante generaciones, nuestra ciudad ha crecido gracias al talento de su gente. Armeria Eskola, un referente en el ámbito de la FP, simboliza esa capacidad de adaptación que nos define. La realidad es cambiante y exigente, y, por eso, ya no basta con aprender una profesión para toda la vida; debemos ser capaces de seguir aprendiendo durante toda la vida”.
“La FP ofrece empleos estables y bien remunerados. Como administración, nuestra responsabilidad es garantizar que los jóvenes puedan desarrollar su proyecto de vida aquí, en Eibar”, incidió.
Un sistema consolidado, en red y orientado al futuro
El viceconsejero Jon Labaka definió el modelo de FP vasco como una red “sólida, basada en las personas, en constante evolución y orientada a los retos del futuro” y remarcó el esfuerzo conjunto de centros, empresas e instituciones en construir un ecosistema de formación conectado con las necesidades reales del mercado: “En los últimos 30 años hemos transformado por completo el modelo, siempre partiendo de la base de lo que necesitan las personas y los agentes que componen sociedad: instituciones, centros de formación, empresas, etc. Hoy la FP está vinculada a la industria 4.0, la robótica, la sostenibilidad, el emprendimiento y el bienestar emocional. Hablamos de centros integrales, conectados con el entorno y capaces de anticiparse a los desafíos sociales y económicos”.
La jornada continuó con una serie de mesas redondas en las que representantes de centros formativos, organizaciones y estudiantes profundizaron en cuestiones como la estrecha relación entre centros de formación y empresas, el enfoque en la salud mental de los jóvenes o la necesaria incorporación de la mujer al sector industrial.
Gipuzkoa, referente europeo en FP
En la primera mesa del encuentro, los ponentes se centraron en las claves que han convertido a la FP de Gipuzkoa en un referente a nivel europeo. Los principales puntos tratados fueron el la estrecha conexión entre educación y empresa, y la capacidad de adaptación a los nuevos perfiles profesionales que ha mostrado este modelo educativo, especialmente en sectores ligados a la industria, la digitalización y la inteligencia artificial.
A lo largo del coloquio, los participantes convinieron que, gracias a la colaboración público-privada, “Gipuzkoa ha logrado posicionar la FP como una de las opciones académicas preferidas por los jóvenes. Esta colaboración permite adaptar los programas formativos a las demandas reales del mercado laboral, lo que se refleja en elevadas tasas de inserción laboral”.
Además, el debate puso sobre la mesa que, más allá de las capacidades técnicas, el bienestar emocional del alumnado se ha convertido en un aspecto estratégico en la preparación de los profesionales del futuro.
Un modelo dinámico y adaptado al mercado
Imanol Urreisti, director de Armeria Eskola, dijo que la FP ha sido capaz de adaptarse a los cambios, lo que le ha permitido mantenerse como un referente en Europa. “La FP ha sabido adaptarse, es dinámica”. Según explicó, “se ha constituido como un referente en ámbitos como el modelo de aprendizaje colaborativo”, y subrayó que la clave del éxito de la FP guipuzcoana radica en “su capacidad de adaptación y evolución constante”.
Por su parte, Gorka Lazkano, responsable de Relaciones Empresariales en el centro Miguel Altuna de Bergara, comentó sobre la importancia de la gestión de las personas y la necesidad de talento. “Hemos acertado en la gestión de las personas y en transmitir la necesidad que tiene la industria de talento. La gente ve en la FP salidas con futuro”, afirmó Lazkano, quien consideró que este mensaje ha calado profundamente en la sociedad.
Gorka Iturzaeta, director de Urola Garaiko Lanbide Eskola (UGLE), mencionó la visión estratégica que subyace en la FP de Gipuzkoa, “una visión que la sitúa como un factor clave para el desarrollo social”. Según Iturzaeta, los centros de FP deben estar alineados con las necesidades de las empresas y formar a los profesionales que demandan los sectores productivos. “Es necesario que la FP sea un agente de cambio que impulse el desarrollo económico y social de nuestra sociedad”, concluyó.
El vínculo entre la formación y el tejido empresarial
Otro de los puntos cruciales tratados fue la estrecha relación entre los centros educativos y las empresas. “La conexión entre la formación y el tejido empresarial es la clave del éxito. Esto hace que los alumnos que se incorporan a las empresas lleguen muy preparados”, reflexionó Arkaitz Carbajo, responsable de Innovación y Nuevas Tecnologías en LKS Next. Además, añadió que la FP ha dejado de verse como algo limitante, “ofreciendo capacidades de formación continua, de manera que las personas que acceden a un puesto de trabajo pueden seguir formándose y capacitándose”.
Jon Busto, responsable de Comunicación de Tolosaldea Lanbide Heziketako Ikastetxe Integratua, también hizo hincapié en la importancia de colaborar con las empresas. “El trabajo en red con las empresas es fundamental para construir un modelo educativo que responda a las necesidades del mercado. Estamos permanentemente en contacto con ellas”, aseveró Busto. Además, incidió en que el modelo dual, “una herramienta eficaz tanto para las empresas como para los centros, es un claro ejemplo de la estrecha colaboración existente entre ambos sectores”.
Adelantarse a las nuevas necesidades tecnológicas
En cuanto a la adaptación de los centros a las nuevas exigencias tecnológicas, Urreisti señaló que la FP de Gipuzkoa ha sabido anticiparse a las nuevas necesidades. “Adaptarse a las exigencias tecnológicas de la industria 4.0 o la digitalización es un reto para nosotros; como centro tenemos que adelantarnos para que las empresas estén actualizadas”, afirmó. También mencionó la importancia de preparar a los alumnos no solo a nivel técnico, sino también en competencias transversales, “como el trabajo en equipo y la capacidad para lidiar con situaciones de incertidumbre”.
En ese sentido, los invitados mencionaron los cursos de especialización, que permiten a los alumnos obtener una formación muy concreta en áreas clave de la industria 4.0. “Los cursos de especialización permiten conseguir en tan solo un año una especialización muy concreta que aporta mucho valor a las empresas”, afirmó Carbajo. Además, constató que las empresas valoran no solo las capacidades técnicas, sino también las habilidades digitales y las interpersonales, que son cada vez más importantes en el entorno laboral actual.
El bienestar emocional del alumnado, una prioridad creciente
Otro tema relevante que surgió en el coloquio fue la importancia del bienestar emocional del alumnado. Urreisti explicó que, aunque las competencias técnicas son esenciales, el bienestar emocional es una base fundamental para el éxito de los estudiantes en el futuro. “Si trabajamos el bienestar emocional desde el centro, esto impactará en el entorno laboral, reduciendo bajas por salud mental, estrés, etc.”.
Lazkano también se refirió a este tema, señalando que en Miguel Altuna se ha constituido un grupo de trabajo para abordar no solo el bienestar del alumnado, sino también del profesorado. “En Miguel Altuna se ha constituido un grupo de trabajo no solo dirigido al alumnado sino también al profesorado”, aclaró, al tiempo que opinó que “es importante tener recursos para apoyar a los estudiantes, especialmente a aquellos que provienen de fuera y que pueden traer consigo una mochila emocional importante”.
Desafíos y barreras a superar
Finalmente, se discutieron algunos de los obstáculos que los centros de FP enfrentan, como la implementación de prácticas obligatorias para todo el alumnado con la nueva ley de FP. Lazkano hizo un llamamiento a las empresas para que sigan poniendo de su parte y hagan un esfuerzo para sistematizar las estancias en empresas, independientemente de la demanda de personal en cada momento. “Quiero hacer un llamamiento a las empresas, para que sigan poniendo de su parte y hagan un esfuerzo para que las estancias en empresas se sistematicen”, concluyó.