El concepto de los centros residenciales para personas mayores en Gipuzkoa se encuentra en plena transformación y la Diputación ya trabaja en un proceso de adecuación de cara a 2030 para concebirlos, diseñarlos y gestionarlos “como un hogar”. Este nuevo modelo residencial implica una pérdida de plazas , ya que se priorizan las habitaciones individuales en favor de “una mayor continuidad y personalización de la atención”.

Así se desprende del Mapa de Servicios Sociales de Gipuzkoa para el período 2024-2030, con el que se prevé la creación de 385 nuevas plazas y el traslado de 299 hasta alcanzar las 5.590 plazas residenciales dentro de cinco años en el territorio. Según se indica en el documento, el envejecimiento creciente y el aumento de las situaciones de dependencia requieren reforzar la atención residencial. “Una versión mejorada de los centros residenciales será vital en un nuevo ecosistema que no puede descansar solo en la atención en la comunidad”, se apunta en el plan.

De este modo, la Diputación ya trabaja en un nuevo modelo que transforme los espacios en unidades convencionales con zonas comunes y en los que se prioricen las habitaciones individuales adecuando la intensidad de las prestaciones sociales y sanitarias a la evolución de las necesidades de las personas. Esta transformación conlleva una pérdida de plazas que deberán ser compensadas con la construcción de nuevos equipamientos como los de Adinberri en Pasaia –previsto para 2027–, Arbes en Irun –para el próximo año– y Errezabal en Elgoibar –iniciarán las obras este curso–.

De este modo, se espera que de aquí a 2030 se creen 684 plazas en Gipuzkoa y otras 299 sean suprimidas con motivo de traslados a otros centros residenciales, dejando, por lo tanto, un balance final de 385 nuevas plazas en el territorio. En total, Gipuzkoa contará para 2030 con 5.590 plazas en centros residenciales que, no obstante, perderán alrededor del 5% de su capacidad actual.

Por comarcas, Bidasoa (con 139), Oarsoaldea (con 130) y Buruntzaldea (con 124) lideran la lista de nuevas plazas, seguidas por Tolosaldea (80), Urola Kosta (70) y Urola Garaia (49).

Además del incremento de plazas, el Mapa de Servicios Sociales considera prioritarios nuevos servicios de alojamiento que impulsen alternativas adecuadas a las necesidades y expectativas de las nuevas generaciones y al medio urbano y rural.

Centros de día

Según se señala en el documento, el 85% de las personas mayores, no obstante, quieren mantenerse en su domicilio, por lo que el plan también contempla la creación de 70 plazas para centros de día, además de trasladar otras 60 al adaptar los recursos a la creciente demanda. En la actualidad, se especifica, el tiempo medio de espera es de dos meses, un tiempo “asumible” para este tipo de servicio.

Esta mejora en los centros de día irá acompañada por una apuesta por las Unidades Residenciales Sociosanitarias (URSS), plazas en unidades especializadas que prestan asistencia ante una situación de pérdida de autonomía funcional. Gipuzkoa cuenta con tres unidades, en Donostia, Zumarraga y Eibar, y un total de 148 plazas, que se espera que se incrementen en 40 más en los próximos cinco años.

En lo referente a personas con discapacidad, se recoge una propuesta de 100 plazas prioritarias en residencias y viviendas y 90 para centros de día. Además, para abordar “la compleja problemática de la salud mental”, el Mapa indica un aumento de un 15% de las plazas en todos los servicios de este ámbito con la puesta en marcha de 68 plazas en residencias para personas con enfermedad mental y 24 en centros de día.

La Diputación también cuenta con más de mil plazas en centros ocupacionales, un servicio que se presta a través del convenio de colaboración con Gureak y que prevé la creación de 92 plazas entre 2024 y 2030.

1.533 plazas para 2030

Entre el resto de apartados que figuran en el plan se encuentra el aumento de 85 plazas en residencias y 35 en centros de día para personas en exclusión, seis destinadas a los centros de acogida nocturna, diez para mujeres víctimas de violencia machista y 60 en centros y tres en centros de día para menores en desprotección.

En total, la estimación de la Diputación es la de crear 1.533 plazas en sus diferentes recursos sociales de cara a 2030, lo que supone 222 plazas anuales de media. No obstante, el mismo informe señala que esta cifra está ligada tanto a la disponibilidad presupuestaria como a la gestión de la ejecución, condicionada a factores internos y externos como trámites administrativos.