El servicio foral de atención integral a la violencia sexual trabaja ya a pleno rendimiento en su ubicación definitiva en el barrio donostiarra de Gros, reemplazando así al centro provisional que se abrió en el mes de julio en la calle Camino. Se trata de un espacio "acogedor y cálido" que cuenta con diferentes salas repartidas a ambos lados de un largo pasillo, y en el que un equipo integrado por seis profesionales prestan una atención inmediata, integral y especializada a mujeres víctimas de violencia sexual, con el fin de facilitar su proceso de recuperación.

El nuevo centro, ubicado en el número 10 de kale Berria, permanecerá operativo durante las 24 horas del día, los 365 días del año, y además del de Donostia, está previsto completar el servicio a nivel territorial con otros dos centros adicionales en Arrasate y Goierri.

Se trata de recursos que, de alguna manera, dejan un cierto sabor "amargo", tal y como ha reconocido la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, ya que vienen a reflejar que la sociedad actual sigue estando lejos de la igualdad entre hombres y mujeres.

Así lo indica el hecho de que haya aumentado un 25% los abusos sexuales en el territorio, o la secuencia de episodios que se han conocido en los últimos días, como el asesinato de la irunesa Mónica de la Llana, presuntamente a manos de su novio en Catalunya en 2022; el ingreso en prisión de un varón de 26 años de edad tras agredir sexualmente a una mujer en la noche del jueves cuando caminaba por el barrio de Intxaurrondo, o el arresto en Pasaia de un hombre por intentar matar a su pareja con un cuchillo.

"Todos estos hechos revelan que tenemos mucho que hacer, lo que justifica la apertura de este espacio", ha expresado Mendoza durante la visita al nuevo centro, acompañada por la delegada del Gobierno en el País Vasco, Marisol Garmendia; el alcalde de Donostia, Eneko Goia; la diputada de Cuidados y Políticas Sociales, Maite Peña, y la directora de Emakunde, Miren Elgarresta.

Atención psicológica y social

El nuevo centro ha sido bautizado como 'Hariberria' y, junto al resto de recursos que se pondrán en marcha en los próximos meses, simboliza "un nuevo comienzo, tejido con hilos renovados", como indica su nombre en euskera. Este dispositivo ofrece un servicio integral que incluye información y orientación sobre los derechos y alternativas y pasos a seguir para las mujeres que han sufrido violencia.

Encontrarán también en este recurso atención psicológica y social para facilitar su proceso de recuperación. El servicio brinda asesoramiento jurídico para acompañar a las víctimas en los trámites legales que requieran. El objetivo es proporcionar un entorno "seguro y confidencial", un espacio adecuado a "diversas necesidades y respetando los ritmos, decisiones e intimidad de cada persona".

El centro, que adapta su atención a diferentes idiomas con el fin de asegurar un "acceso inclusivo", está dirigido a mujeres mayores de 16 años, así como a sus familiares y el entorno cercano. Las personas que así lo deseen, tienen a su alcance el correo electrónico hariberria@gipuzkoa.eus, el teléfono 900 840 188 y el WhatsApp 747 444 389 para realizar cualquier consulta.

Cuatro millones de euros en Euskadi

El presupuesto total del local ha rondado los 950.000 euros, de los que aproximadamente 400.000 se han destinado a la adecuación del espacio, mientras que la compra del local ha supuesto unos 550.000. A través de los fondos europeos Next Generation, el Gobierno español ha destinado en Euskadi cuatro millones de euros para abrir centros de atención 24 horas.

La delegada del Gobierno en el País Vasco, Marisol Garmendia, ha destacado que el nuevo centro de Gros supone “el compromiso claro y profundo” del Ministerio de Igualdad en la lucha activa en contra de la violencia machista. Garmendia ha destacado la importancia de la colaboración entre todas las instituciones para erradicar la lacra de la violencia hacia las mujeres. “La violencia machista ha matado a más de 40 mujeres este año, algo que no lo pueden negar las derechas ni las ultraderechas”, ha remarcado Garmendia, quien ha resaltado la necesidad de abrir centros como el que se acaba de inaugurar en el barrio donostiarra de Gros. 

Por su parte, el alcalde de Donostia, Eneko Goia, ha agradecido a la Diputación haber ubicado de forma definitiva en la capital guipuzcoana este recurso, que refuerza los diferentes servicios que desde el Ayuntamiento se presta en la ciudad a las víctimas de violencia sexual y machista. “Ejemplos como los que hemos conocido estos últimos días nos indican a las claras que nos queda un largo camino por recorrer para lograr la igualdad efectiva entre hombres y mujeres”. En ese sentido, Goia ha reconocido que este tipo de centros “desgraciadamente, son necesarios. Ojalá algún día no lo fueran, pero hoy por hoy lo son, y en ese sentido es importante destacar la colaboración entre diferentes instituciones y agentes para dar una respuesta a la violencia machista”. 

Nuevos recursos en Arrasate y Goierri

En esa misma dirección van los recursos que estarán operativos en los próximos meses. Se espera que el centro de Arrasate abra sus puertas a finales de año, y el de la comarca del Goierri el primer semestre de 2025. Una red de centros con los que la Diputación busca reforzar su compromiso en la atención integral a las víctimas de violencia sexual, complementando así el servicio de urgencias sociales.

La financiación de estos tres servicios, que asciende a más de 1,1 millones de euros, proviene del Ministerio de Igualdad a través de los fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR). Desde su apertura en julio el centro temporal ubicado en la calle Camino ha atendido un total de 183 consultas, de las que 92 fueron realizadas por profesionales, 80 por víctimas, siete por familiares y cuatro por el entorno cercano.