Desde que se presentara el febrero pasado, Basotik Fundazioa ha firmado 50 contratos con propietarios forestales para el cuidado de sus bosques, lo que supone 500 hectáreas de Gipuzkoa. Además, en este tiempo más de 650 familias han realizado una solicitud de propuesta de gestión y 1.600 personas han participado en las charlas informativas, por lo que la previsión de la Diputación es que a final de año la gestión alcance las mil hectáreas.
Así lo han dado a conocer este viernes en rueda de prensa el diputado de Equilibrio Territorial Verde, Xabier Arruti, y el director de Basotik Fundazioa, Jon Ander Ostolaza, al tiempo que han recordado que la iniciativa tiene como objetivo formalizar contratos con los propietarios forestales para el cuidado de los bosques. "Hemos respondido a una necesidad de la población y de los propietarios de los terrenos", ha apuntado Arruti.
De este modo, en estos seis meses, la Diputación ya ha conseguido formalizar 50 contratos que suponen 500 hectáreas de bosque del territorio. Además, más de 1.600 personas han participado en las charlas informativas y se han recibido más de 650 solicitudes de familias propietarias para realizar una propuesta de gestión, lo que supondrían alrededor de 7.000 hectáreas de superficie forestal.
"Se ha encendido el interés por la iniciativa. Ahora, queremos dar respuesta a todas las personas, pero necesitamos tiempo. Hay que llevar a cabo un análisis y ver en todos los casos qué plantar o no", ha apuntado el diputado de Equilibrio Territorial Verde, señalando que aunque inicialmente se preveía diagnosticar 1.800 hectáreas este año, se ha tenido que aumentar en mil más para poder responder a toda la demanda.
Por este motivo, la previsión de la Diputación es que al cerrar el año Basotik Fundazioa gestione entre 800 y 1.000 hectáreas de bosque, lo que equivaldría a aproximadamente 2.000 campos de fútbol. "Queremos aprovechar el potencial que ofrecen los bosques de Gipuzkoa para poder trabajar el bienestar físico y emocional de nuestra ciudadanía a través del contacto con la naturaleza", ha agregado Arruti.
Perfiles de solicitantes
En lo referente al perfil de las personas interesadas, Ostolaza ha indicado que, principalmente, son de dos tipos: por un lado, propietarios que, por diversos motivos como la edad o la falta de un relevo generacional, no pueden gestionar su patrimonio forestal; y, por otro lado, personas que han heredado el terreno y que no tienen un apego especial por él ni lo han trabajado.
"En algunos casos estamos iniciando el ciclo de vida del bosque mediante plantaciones y en otros nos solicitan la gestión del patrimonio forestal ya establecido", ha explicado el director de la fundación, por lo que la duración del contrato de gestión cambia en cada caso desde los acuerdos que van desde un año hasta los que se extienden por 150 años. La mayoría de los contratos firmados han sigo en Debabarrena, seguido de Goierri, Debagoiena, Tolosaldea y Urola Kosta.
Acciones de sensibilización
Con el objetivo de crear una mayor sensibilización en la protección de los bosques, la fundación ha creado, además, una serie de acciones como el apadrinamiento de bosques por parte de empresas y talleres de plantación de árboles para asociaciones del tercer sector y centros escolares.
Asimismo, se ha puesto en marcha una iniciativa de baños de bosques para asociaciones y residencias con las que crear experiencias de conexión con la naturaleza y se llevarán a cabo jornadas de reforestación abiertas a la participación ciudadana.