Un jugador del equipo Primavera, el conjunto filial del equipo AS Roma, robó un vídeo íntimo del teléfono de una empleada del club con su pareja, que se especula sea también trabajador de la misma entidad, y lo filtró entre sus compañeros y demás miembros de la plantilla de un club que decidió despedir a la afectada.
La Fiscalía de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) abrió este viernes un expediente para investigar un caso que explotó en Italia después de que Il Fatto Quotidiano desvelara la noticia. El máximo organismo del fútbol italiano ya ha comenzado con los interrogatorios y la obtención de documentos.
Investigación interna
Los hechos se remontan a noviembre, cuando el joven jugador del Primavera, mayor de edad, según reporta el medio mencionado, pidió a la empleada el teléfono para hacer una llamada y aprovechó la ocasión para fisgonear en su galería, enviándose a su móvil un vídeo sexual de la mujer con su novio.
El canterano compartió entonces el archivo a sus compañeros de equipo y acabó en manos de la mayoría de la plantilla del club, incluidas las de algunos y directivos o miembros de la plantilla del primer equipo.
Una vez conoció el caso, la Roma se reunió con el equipo Primavera y el jugador confesó haber sido el culpable de la filtración, hecho que no impidió al club despedir a la empleada en el mismo mes de noviembre pese a llevar en el club una década.
El mencionado diario publicó la carta de despido, justificándolo como una "incompatibilidad".
Despedida por "incompatibilidad"
"Se puso en conocimiento del departamento de recursos humanos y de la alta dirección un vídeo en el que aparece inequívocamente realizando actos sexuales. Desgraciadamente, tenemos entendido que este vídeo fue visto por una gran parte del personal y de los jugadores de la empresa, provocando incompatibilidad de la continuación de su relación laboral con el desarrollo sereno y regular de las actividades de la empresa", publicó el medio.
El caso podría llegar a los tribunales pues la empleada trabaja con un abogado para denunciar lo ocurrido.
Existe la posibilidad, según notifican este viernes varios medios locales, de que la pareja de la afectada fuera también un empleado de la Roma, un superior directo que habría sido también despedido por los mismos motivos.
Varias asociaciones que trabajan en la defensa de los derechos de las de mujeres italianas se han pronunciado en favor de la afectada, la única de Italia que trabaja en un equipo de fútbol dirigido por una mujer, la griega Lina Souloukou.