El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha asegurado este jueves que la prioridad de las instituciones vascas es que haya "la mejor atención médica posible" para quien "lo necesita", y ha asegurado que en Euskadi no se contempla que "alguien pueda quedar desamparado". Además, ha defendido la colaboración público-privada para cuidar la salud ciudadana, "el bien más preciado", durante el acto por el centenario del del Hospital San Juan de Dios de Santurtzi.

Urkullu ha asistido, junto a la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, a la conmemoración del centenario de este hospital. A su llegada, ha sido recibido por Amador Fernández, superior provincial de la Orden San Juan de Dios; Fuensanta Icaza de la Sota, presidenta de la Fundación Benéfica Aguirre; Mariano Bernabé, superior de la Comunidad de Hermanos del Hospital San Juan de Dios de Santurtzi; y Vicente Fernández Zurita, director gerente del centro.

Tras un aurresku de honor, se ha realizado una foto de familia y se ha descubierto una placa conmemorativa de la efeméride en el vestíbulo de entrada al centro sanitario. En ese momento, el lehendakari ha firmado en el libro de honor del Hospital San Juan de Dios.

En su intervención ante los asistentes, Iñigo Urkullu ha destacado que el pueblo vasco "siempre ha tenido claro que lo primero es la persona y que nadie puede quedar atrás", porque "tender la mano a quien lo necesita forma parte de nuestros valores y principios". "No contemplamos que alguien pueda quedar desamparado, abandonado a su suerte. Esta es nuestra manera de ver la vida. Forma parte de nuestro ADN", ha remarcado.   

PREOCUPACIÓN POR EL INDIVIDUALISMO

No obstante, ha subrayado que, "frente a esta filosofía de vida y convivencia", ve "con preocupación cómo estos últimos años gana terreno el individualismo". "La cultura de 'yo' se va imponiendo frente al 'nosotras y nosotros'. Debemos de tratar de revertir esta tendencia, debemos reafirmar los valores de la cercanía y la solidaridad que siempre han distinguido a nuestro pueblo", ha afirmado.

Según ha resaltado, Euskadi "ha avanzado siempre desde la colaboración y el trabajo en equipo", 'auzolana'. "Quien nos necesita sabe que ahí nos tendrá. Este es el espíritu con el que nació el Hospital San Juan de Dios y que queda reflejado en su premisa inicial que hoy recordamos porque sigue vigente: 'Contribuir al mejoramiento material y moral de los vizcaínos dolientes'", ha apuntado.

El Lehendakari ha recordado que, de este modo, los Hermanos de San Juan de Dios "asumieron la responsabilidad de la organización y funcionamiento de un hogar para niños pobres, lisiados y tullidos". "Y no solo eso. Esta atención gratuita dirigida a las y los niños, comprendía, además de los cuidados médicos, la enseñanza escolar y la educación religiosa", ha añadido.

En su opinión, este centro hospitalario es un ejemplo de la historia vasca. "Nuestro sistema público y universal de salud no nació por casualidad. Lo hizo porque la sociedad vasca en su conjunto comparte los mismos valores que guiaron hace 100 años a los hermanos de Aguirre y Basagoiti; esto es, que quien lo necesite reciba la mejor atención médica posible, de la mano de las y los mejores profesionales y con los mejores medios a su alcance", ha puesto en valor.   

LA PRIORIDAD DE LA INSTITUCIONES

Iñigo Urkullu ha asegurado que este "compromiso sigue siendo hoy la prioridad de las instituciones vascas". "Hoy, este Hospital San Juan de Dios forma parte del sistema vasco de salud; un Centro privado sin ánimo de lucro que aporta su experiencia centenaria a nuestro servicio público", ha manifestado.

A su juicio, "este es un ejemplo de colaboración público-privada en estado puro". "Gracias a este modelo, conseguimos ofrecer más y mejores prestaciones a toda la ciudadanía, una asistencia de calidad para cuidar el bien más preciado: nuestra salud", ha concluido.