Las instituciones vascas destinaron en 2022 más de 81,3 millones de euros a proyectos de cooperación que se desarrollaron en 68 países y también en Euskadi. Con estos fondos 228 ONGD vascas y 335 entidades de países empobrecidos pudieron apoyar hasta 1.189 iniciativas.

 El año pasado proyectos desarrollados en México, Centroamérica y el Caribe recibieron el 30% de los fondos, mientras que a Suramérica y África subsahariana fueron respectivamente el 23% del capital. Los principales países receptores de los fondos de cooperación vasca fueron Guatemala, Colombia, El Salvador y Perú.

 El 60 % se destinó a iniciativas de cooperación internacional para el desarrollo y un 21% a acción humanitaria y de emergencia para paliar la situación de la población en distintas crisis humanitarias.

Euskadi, quinto preceptor

Pero no todos los fondos se fueron a proyectos en el extranjero ya que Euskadi en 2022 fue el quinto receptor, en gran medida a los proyectos puestos en marcha para acompañar a la población ucraniana refugiada llegada tras el estallido de la guerra. Casi el 11 % de los fondos, 8,8 millones de euros, se invirtieron en acciones de educación para la transformación social en Euskadi.

 Agenda 2030

Por primera vez, el informe ‘La cooperación vasca en cifras 2022’ analiza la contribución de las instituciones públicas vascas de cooperación a la Agenda 2030. El resultado es que la principal aportación a los Objetivo de Desarrollo Sostenible fue a la igualdad de género (20%), seguida de a la reducción de desigualdades (16%), y a la paz, justicia y a fortalecer as instituciones, casi un 16 %.

Ley Vasca de Cooperación y Solidaridad

El Gobierno vasco aprobó el pasado julio el proyecto de Ley Vasca de Cooperación y Solidaridad. La nueva norma todavía tiene que superar el trámite parlamentario, y sustituirá a la ley de 2007 incluyendo nuevos retos como la emergencia climática. La base de la norma es que Euskadi destine el 0,7% de su PIB a cooperación al desarrollo.

Euskadi se mantuvo en 2021 como la comunidad que más dinero destinó a la ayuda al desarrollo con un total de 72,5 millones de euros, la mayoría de ellos (53 millones) aportados por el Gobierno vasco.