El PNV asegura que el resultado final "va a ser satisfactorio" y la ley de Educación, a la que augura un "futuro largo", va a salir adelante con "un consenso prácticamente del 83%" del Parlamento Vasco, el PSE se compromete con "la búsqueda de acuerdos amplios" y "transversales" y EH Bildu asegura que siguen "en el barco" y esperan "llevarlo a buen puerto entre todos".

Por su parte, Vox critica que "solo recoge la sensibilidad nacionalista" y el PP que el PNV "se ha escorado hacia las posiciones radicales de Bildu, mientras que Elkarrekin Podemos acusa al Gobierno vasco de "incumplir reiteradamente" el pacto educativo.

En un debate en Radio Euskadi, recogido por Europa Press, los parlamentarios vascos se han referido a la tramitación de la ley de Educación y a la intención de que se apruebe en este curso político expresada tanto por el lehendakari, Iñigo Urkullu, como por el consejero de Educación, Jokin Bildarratz.

El parlamentario y presidente del ABB, José Antonio Suso, ha señalado que en la tramitación de la Ley de Educación "se está demostrando que hay que buscar el mayor consenso posible". Tras lamentar que Elkarrekin Podemos ha decidido "no estar en el consenso" alcanzado con el primer acuerdo de bases del pacto educativo, ha señalado que "todavía queda prácticamente un 83% del Parlamento que trabaja por hacer una ley de Educación que tenga una larga historia, como la ha tenido la ley de la Escuela Pública Vasca que se aprobó en el año 93".

"Si uno mira las leyes de educación que hemos tenido en el Estado, todas tienen nombre de un ministro, del ministro de la época en que se han aprobado y pueden durar el tiempo que dura el presidente del gobierno, pero esta no va a tener el nombre de un consejero, va a ser una ley que vamos a conseguir con ese consenso prácticamente del 83%", ha subrayado, para mantener que una ley de educación "tiene que durar en el tiempo, recoger las diferentes sensibilidades, tener en cuenta cuál es la realidad de Euskadi".

En este caso, el presidente del ABB ha asegurado, que "el resultado final va a ser satisfactorio, porque cuando se trabaja se consiguen resultados". "Creo que es una ley que va a tener un futuro para el país tan largo como ha podido tener la actual ley de la Escuela Pública Vasca y en eso tenemos que trabajar", ha reiterado.

Por su parte, el parlamentario de EH Bildu Mikel Otero ha defendido que la ley de Educación "tiene que ser una herramienta fundamental, aunque no la única, para abrir una nueva fase en la construcción de la educación en este país de la educación pública".

Según ha explicado, la coalición soberanista está "ultimando enmiendas para tratar de responder y clarificar" algunos de los aspectos que, a su entender, están "poco claros". Otero ha considerado importante que la ley "recoja diferentes sensibilidades" y "esa hostilidad más o menos encubierta hacia la euskera que se ha mostrado en algunos discursos".

Mikel Otero ha advertido que "no solo tenemos que estar atentos a la ley, sino que también tenemos que tener una dedicación especial a las necesidades específicas de la escuela pública que también están en este debate". "Seguimos en el barco y esperemos llevarlo a buen puerto entre todos", ha asegurado.

Desde el PSE-EE, Ekain Rico ha considerado que "lo importante es no perder de vista cuál tiene que ser el objetivo de esta ley", que debe ser "dar respuesta a todos los retos de futuro que tiene nuestro sistema educativo, que no son pocos, y garantizar y promover el papel de la escuela pública y la igualdad de oportunidades.

Tras mostrar su compromiso con "la búsqueda de acuerdos amplios" y "transversales", algo que, según ha dicho, es el objetivo de "los dos grupos del Gobierno", Rico ha asegurado que los socialistas van a poner "toda la carne en el asador para conseguir" todos los objetivos que el PSE cree que "tienen que ser la base central de la ley" y "la búsqueda de acuerdos, siempre y cuando sean posibles, siempre cuando no toquen puntos neurálgicos que yo entiendo que en el acuerdo de bases quedan absolutamente concretados".

"Esta no puede ser ni la ley del euskera, ni la ley del castellano, ni la ley del inglés, sino que tiene que ser la ley de nuestros estudiantes y de nuestro sistema educativo, la ley que estructure los retos a los que nos tenemos que hacer frente", ha remarcado.   

ENMIENDA A LA TOTALIDAD

La parlamentaria de Elkarrekin Podemos, Isabel González, ha confirmado que su grupo está preparando la enmienda a la totalidad, a la vez que parciales, a una ley "clave" porque "no es tanto qué, sino para qué, para quién, y el para quién de esta ley". A su entender, el fin de esta ley "tiene que ser la escuela pública y la lucha contra la segregación". Tras recordar que Elkarrekin Podemos aprobó inicialmente el pacto educativo, ha denunciado que el Gobierno Vasco lo ha ido "incumpliendo reiteradamente con las normas y decretos que ha ido sacando".

En ese sentido, se ha preguntado "en que parte del texto que tenemos sobre la mesa se refleja en la centralidad de la escuela pública más allá de una pura retórica, porque una cosa es decir que la escuela pública debe ser el eje vertebrador, y a todas se nos llena la boca y al resto de grupos también, y otra es hacerlo a través de normas y leyes".

"Y el gobierno vasco ha ido en un sentido absolutamente contrario y perjudicando a la escuela pública, haciendo todo lo posible por asegurar que la concertación del sistema educativo se consolide", ha reiterado.

González ha advertido que Elkarrekin Podemos va a defender en esta ley, "como en todas, lo público, en este caso la escuela pública, la educación pública, y los servicios esenciales garantizados desde lo público y no desde la concertación".

La parlamentaria del PP y secretaria general de los populares vascos, Laura Garrido, ha coincidido en que es una ley "clave" y ha considerado "muy preocupante" la situación de la educación en Euskadi.

Según ha denunciado, el PNV "se ha escorado hacia las posiciones radicales de Bildu y eso no es bueno para nuestro sistema educativo", porque, al final, "se pone la educación claramente al servicio del proyecto y del ideario nacionalista", cuando, según ha dicho, la educación "tiene que ser todo lo contrario de ponerla al servicio de un proyecto nacionalista que es sectario y agregador".

A su juicio, de esta forma, "se está muy lejos de que así se pueda configurar un sistema educativo de calidad" y, el proyecto de ley, "si finalmente se convierte en ley, no va a servir para resolver los problemas que tiene nuestra educación".

Garrido ha augurado que estamos "ante una oportunidad perdida" porque, según ha dicho, "no se va a configurar una educación de calidad y no se van a corregir disfunciones". "No se pueden pisotear los derechos de aquellos padres que quieren libremente escoger la educación que quieren para sus hijos", ha advertido.

Por último, la portavoz parlamentaria de Vox, Amaia Martínez, ha dicho que este proyecto de ley, que es "un consenso directamente entre EH Bildu y PNV", es "muy importante, porque es el futuro de nuestros hijos y de nuestra sociedad". Sin embargo, ha criticado que "la única intención de este proyecto de ley, que no recoge las diferentes sensibilidades ni la libertad de elección, es que nuestro hijos sepan hablar euskera".

Martínez, que ha precisado que "no hay hostilidad hacia la euskera", sino "oposición a la imposición de la euskera", espera que esta ley "no llegue a ser aprobada por esa amplia mayoría que dicen que es Bildu y PNV únicamente, porque solamente recogería la sensibilidad nacionalista".