Un hombre que fue víctima de una tentativa de homicidio en Donostia tras recibir una puñalada durante una discusión en noviembre de 2021, ha pedido este lunes al tribunal que enjuicia el caso que deje en libertad al acusado, teniendo en cuenta que el incidente "ya pasó" y que él está "vivo". El perjudicado ha hecho esta petición en la parte final de su declaración que ha tenido lugar este lunes en la primera jornada del juicio que se sigue en la Audiencia de Gipuzkoa por estos hechos, por los que la Fiscalía pide once años de cárcel para el procesado.

El ministerio público solicita además una multa para otros dos hombres -uno de ellos padre del principal inculpado- a los que les imputa un delito de lesiones leves por su presunta participaron en la agresión.

INDEMNIZACIÓN ECONÓMICA

Este lunes la víctima, que no ha renunciado a la indemnización económica que le pudiera corresponder por estos hechos, ha hecho un inciso en su declaración para interceder en favor del hombre que está acusado de acuchillarlo en el abdomen la madrugada del 19 de noviembre de 2021 en el barrio donostiarra de Roteta (Altza). "Yo les pediría que tomaran en cuenta que esta historia ya pasó, que yo estoy bien, que estoy vivo y que él ya tiene más de un año de estar privado de su libertad", ha dicho la víctima mientras se dirigía al tribunal justo cuando el fiscal finalizaba ya su interrogatorio. "No sé qué va a salir de todo esto, pero si yo pudiera pedir la libertad del joven pues lo hago. Mi petición más grande es esa", ha insistido el damnificado, quien ha aclarado no obstante que formulaba esta solicitud para su "tranquilidad", aunque sin dar más detalles sobre este extremo.

Sí ha precisado, no obstante, que conocía previamente a los agresores de haberlos visto en el barrio del que todos ellos eran vecinos y porque se trata además de "una familia numerosa".

"SÉ QUE SE EQUIVOCÓ"

"Son personas alegres, normales". "En ese momento no sé qué pasó". "Lo que sí sé es que se equivocó", ha detallado el testigo, quién ha dicho ser consciente de que el principal acusado "tiene una madre que desde ese día ha desmejorado mucho su salud". "Yo soy hijo también y tengo una madre que está en mi país", ha finalizado. Previamente, había relatado con detalle cómo sucedieron los hechos aquel día, cuando sobre las 3.00 horas vio desde la ventana de su casa una discusión que tenía lugar entre su compañero de piso y la madre de éste, que también estaba siendo presenciada a unos 50 metros de distancia por los tres acusados, el más joven de los cuales comenzó a insultar al hijo y a amenazarle de muerte.

En ese contexto, tanto el hijo como la madre subieron a su vivienda, si bien él bajo a la calle para pedir a los tres hombres que se tranquilizaran porque el más joven seguía "acalorado" y "gritando".

El hombre ha relatado que, aunque les pidió que se "calmaran", uno de ellos le dio un puñetazo y otro le propinó una patada que le tiró al suelo, donde fue golpeado por los tres, hasta que la madre de su compañero de piso, que había regresado al lugar, se interpuso y él logró levantarse.

NO FUE CONSCIENTE DE LA PUNZADA

Ha recordado que en ese momento la mujer le dijo que estaba herido porque sangraba, ya que mientras estaba en el suelo no fue consciente de la "punzada". Él mismo llamó al número de emergencias, tras lo que acudieron al lugar varias dotaciones de Policía y dos ambulancias, sin que él pudiera ver en ningún momento quién le había apuñalado. No obstante, la mujer que intercedió en el suceso ha desvelado que ella vio al principal acusado con un puñal en la mano que identificó "con nitidez".

El hijo de esta testigo ha explicado además que él también presenció la reyerta desde la ventana de su casa, en la que según ha comentado participaron cuatro hombres y no tres, y ha añadido que, aunque no vio la navaja, sí fue testigo de cómo el principal inculpado hacía el "gesto" de apuñalar con un "bulto" en la mano.

Los tres procesados, por su parte, se han negado responder a las preguntas de la Fiscalía y sólo han contestado a las de su abogado defensor. El más joven de todos, al que se atribuye el intento de homicidio, ha señalado que no recuerda muy bien lo sucedido porque aquella noche había bebido y consumido drogas, aunque si ha detallado que cuando ocurrieron los hechos había bastante gente "discutiendo" y él se marchó para su casa.

Este hombre ha negado haber amenazado o clavado una navaja a la víctima, mientras que los otros dos encausados han corroborado que aquella noche había entre diez y doce personas en la calle, que ellos no participaron en lo sucedido y que desconocen quien fue el autor de la puñalada porque ellos se marcharon del lugar.

Está previsto que el juicio continúe mañana con la práctica de nuevas pruebas.