Dos casos opuestos. En su extenso informe anual, el Ararteko subraya algunos casos destacados de distintas naturaleza y resultado. Unos que se resuelven con buena voluntad, y otros que no obtienen respuesta y a menudo afectan a adminisraciones locales, como el caso del Ayuntamiento de Deba, a quien la oficina de la Defensoría del Pueblo reprocha su falta de colaboración.

El Ararteko advierte, por un lado, que en 2022 se han recibido siete quejas relacionadas con la actuación de la sociedad foral Bidegi, encargada de la gestión de las vías de alta capacidad de Gipuzkoa. Todas ellas relacionadas con la gestión del peaje de la A-636 entre Beasain y Bergara.

Según explica la oficina del Ararteko, “en un supuesto específico, un ciudadano presentó una queja” por la obligación del uso del correo electrónico para relacionarse con Bidegi y habilitar un método de pago para el peaje. Bidegi, según el Ararteko, le negó la posibilidad de vincular su vehículo a una tarjeta bancaria como usuario de la autovía de Beasain por no disponer de dirección de correo electrónico.

Bidegi tiene atribuida la gestión y recaudación del canon de esta autovía. El peaje en la A-636 se puso en marcha el 18 de enero de 2022 y se habilitió una página web en la cual las personas usuarias de la autovía deben integrar datos que permitan vincular una matrícula de vehículo con una tarjeta bancaria a fin de efectuar el pago requerido. La mencionada página web obliga a aportar un dato de correo electrónico para validarse en el sistema y de ese modo, poder vincular la matrícula con la tarjeta bancaria.

En este caso, el Ararteko dictó una recomendación de fecha 6 de octubre por la que se recomendó al Departamento Infraestructuras Viarias de la Diputación Foral de Gipuzkoa “que habilite medios y canales no electrónicos para la exacción, gestión y recaudación del canon de uso de infraestructuras viarias (regulados en la Norma Foral 4/2019 de Buen Gobierno de Gipuzkoa), de acuerdo con el principio de multicanalidad, con el fin de impedir restricciones o discriminaciones de la ciudadanía”. La recomendación del Ararteko fue aceptada por la Administración foral.

Asimismo, se han planteado quejas relacionadas con la obligación de utilizar unos concretos medios de pago implantados por la administración en esta misma autovía y con el propio modelo de gestión efectuado por Bidegi mediante los medios técnicos y personales que ofrece a la ciudadanía.

El Ayuntamiento de Deba habría desatendido dos requerimientos de la oficina del Ararteko a lo largo de 2022

Pero no todas las administraciones han corregido su actuación como consecuencia de la intervención del Ararteko. En la mayoría de los casos, el Ararteko se ha visto obligado a entender que sus recomendaciones han sido desatendidas, porque la Administración no ha respondido a sus solicitudes. Ello ha sucedido con el Ayuntamiento de Deba, que habría ignorado el doble requerimiento del Ararteko en relación a la OTA de verano.

En este ámbito, recoge el informe, “ha constituido motivo de queja la diferencia de trato en el estacionamiento regulado, en época estival, entre residentes y veraneantes. La Resolución del Ararteko, de 22 junio de 2022, analiza esta cuestión y recomienda al Ayuntamiento de Deba que revise la Ordenanza reguladora de la utilización privativa o el aprovechamiento especial del dominio público local mediante el estacionamiento de vehículos en zonas reguladas de la villa (OTA), en lo relativo al diferente tratamiento que otorga a los residentes empadronados y a los vacacionales”.

“Hasta el momento, y tras ser requerido en dos ocasiones, no hemos recibido respuesta del Ayuntamiento (de Deba) sobre su disposición a aceptar la recomendación”, lamenta el Ararteko.