El Ararteko ha reconocido esta mañana que ha planteado una modificación de la ley (la Ley del Ararteko tiene 40 años) que permita al organismo que dirige imponer sanciones, al igual que se ha hecho en Navarra. Lezertua ha destacado el “importante” efecto disuasorio que tendría esta medida. Así lo ha asegurado esta mañana el defensor del pueblo en Euskadi, después de presentar a la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria, su informe anual.
Manuel Lezertua ha expresado hoy su "preocupación" por la falta de respuesta de algunas administraciones vascas a sus requerimientos, un problema creciente, aunque admite que varias de ellas son pequeños ayuntamientos que alegan problemas de gestión administrativa. Quizá porque no dan abasto. Asegura que eso le impide realizar sus funciones “adecuadamente” y que “cuando no se contesta al Ararteko, al final, el perdudicado es el ciudadano”.
"Hemos tenido que recurrir a mecanismos que yo, desde que integré la institución del Ararteko, había intentado evitar, que era recordar a las administraciones que es un delito no cooperar con el Ararteko", ha señalado.
Se refiere a los 46 apercibimientos dirigidos fundamentalmente a responsables municipales y a dos departamentos del Gobierno Vasco. 28 de ellos, los que iban dirigidos a los consejeros del Gobierno Vasco, fueron atendidos a finales de 2022, pero aún quedan pendientes, según ha explicado Lezertua, siete expedientes en algunas administraciones locales “recalcitrantes”.
