El 'zasca' de una enfermera de Donostia a una compañera de Cádiz del CatSalut que ningunea el catalán
Indignación en las redes por un vídeo viral en el que una trabajadora gaditana del Hospital Vall d'Hebron se queja por tener que aprender catalán: "Para sacarnos las putas oposiciones, nos piden el puto C1 de catalán"
Un vídeo de tres enfermeras del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona está generando una intensa polvareda en las redes sociales. Las protagonistas del vídeo, que fue colgado en TikTok y se ha convertido en viral en Twitter, son dos enfermeras andaluzas -una de Cádiz y otra de Granada- y una de Donostia. La que lleva la voz cantante del vídeo es la trabajadora gaditana, que muestra un tríptico que le ha entregado un sindicato para informarle sobre las próximas en el CatSalut. "¿Esto qué mierda es?", se pregunta la joven, a la que la enfermera guipuzcoana le responde que "es de un sindicato". La primera insiste en dar muestras de ignorancia y sigue preguntando: "¿pero para sacarnos qué?". A lo que la donostiarra le responde: "Las oposiciones".
A partir de aquí llega la parte que ha causado más polémica del vídeo. "Para sacarnos las putas oposiciones sabéis qué tenemos que tener? El puto C1 de catalán", afirma indignada la enfermera gaditana, que se pregunta quién se apuntará, esperando que las otras dos enfermeras lo nieguen. Sin embargo, la enfermera donostiarra asegura que ella se apuntará y empieza a expresarse en catalán, ante la sorpresa de sus dos compañeras andaluzas del CatSalut. "Me estás destrozando el vídeo, tía", le dice la enfermera gaditana a la vasca. Mientras la donostiarra sigue hablando en catalán de fondo, la enfermera de Cádiz prosigue con su ninguneo al catalán: "Se va a sar el C1 de catalán mi madre, porque yo no".
La consejería de Salud y el hospital Vall d'Hebrón investigarán el vídeo catalanófobo de una enfermera de Cádiz
La falta de respeto hacia la lengua catalana de esta enfermera de Cádiz ha causado una gran indignación en redes sociales, donde muchos usuarios se quejan de que "auténticas personas catalanofóbicas estén cobrando dinero público de Catalunya". Otros señalan que no es extraño que la enfermera guipuzcoana sí se haya apuntado a aprender catalán. “No es casualidad que la que se haya apuntado a aprender catalán sea la vasca. La cultura y el sentimiento de fraternidad entre las diferentes nacionalidades del estado emerge frente el odio que se proyecta por parte de algunos monolingües hacia las mismas”, afirma un usuario.
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