Un joven de 22 años, interno en el Centro Penitenciario de Zaballa y sobre quien pesaba una larga condena, ha sido hallado muerto este martes por la mañana en su celda cuando los funcionarios han acudido a hacer la apertura diaria de las celdas.

El cuerpo del joven ha sido descubierto a las 8.00 horas, cuando los trabajadores de la prisión han hallado el cuerpo del joven sin signos vitales, por lo que han avisado inmediatamente al Servicio Médico del centro que, pese a acudir con el instrumental de reanimación, solo ha podido certificar su fallecimiento.

El fallecido es un joven con condena firme, que afrontaba una "larga condena en prisión por un delito grave", ha informado el Departamento vasco de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, encargado de la gestión de las prisiones vascas.

El fallecido ingresó en este centro penitenciario hace casi dos años y medio, en septiembre de 2020 y no se habían detectado en él indicios que motivaran la activación del protocolo de prevención de suicidios.

Desde la prisión se ha informado a los allegados y al Juzgado de Guardia del fallecimiento y una comitiva judicial ha acudido para proceder al levantamiento del cadáver.

Por su parte, la Dirección de Justicia del Gobierno Vasco incoará un expediente informativo a fin de determinar y analizar los hechos.

Consternación

El Gobierno vasco ha mostrado su consternación por este hecho a través de su portavoz, Bingen Zupiria, quien en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno ha comunicado el fallecimiento y ha enviado sus condolencias a los familiares del joven.

"Esta es la peor noticia que se puede dar desde un centro penitenciario. Todo el equipo implicado en la custodia del interno está profundamente afectado", ha indicado el Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, que ha querido ofrecer esta información "como muestra de transparencia", aunque de momento carece "de más datos objetivos sobre las circunstancias que han rodeado el deceso".