El portavoz del Gobierno vasco, Bingen Zupiria, ha recordado a la UE que "tiene una obligación" en la situación de los migrantes dentro de "sus fronteras", como son los casos de Melilla o Irun, donde fallecen subsaharianos "desesperados" que pretenden "encontrar una vida mejor" en otros países.
En la comparecencia posterior al Consejo de Gobierno, Zupiria ha recordado "las imágenes tremendas" que se vivieron la pasada semana en Melilla, con la muerte de al menos 23 subsaharianos que pretendían saltar la valla.
"Estamos asistiendo a noticias como esta en diferentes lugares del mundo, que nos hablan de la desesperación de muchos seres humanos que dejan sus lugares de origen y sus lugares de vida, para encontrar una vida mejor y un bienestar mayor en otros nuevos países", ha añadido.
A su juicio, el que, de forma repetitiva, se vean a través de los medios de comunicación "este tipo de imágenes", deben hacer que la ciudadanía "se mantenga en guardia". "No debemos permitir que esas imágenes se conviertan en algo cotidiano en nuestras vidas y nos lleven a perder la empatía por esas personas que están viviendo ese sufrimiento", ha afirmado.
RESPETO A LOS DERECHOS HUMANOS
El portavoz del Ejecutivo vasco ha recordado que el continente europeo "está avanzando en su construcción institucional, lo ha hecho siempre sobre la base de unos valores en los que, sobre todo, destaca el respeto a la vida humana y a los derechos humanos".
Por ello, cree que "toda Europa tiene una obligación respecto a situaciones que se están viviendo en sus fronteras y en sus confines". "Por lo tanto, creemos que la situación de esas personas, tanto en Melilla como en Irun, es una situación que nos incumbe a todos", ha aseverado.
