donostia - Gipuzkoa cuenta desde ayer con un nuevo municipio, Itsaso, ubicado en la comarca de Goierri, tras su definitiva desanexión de Ezkio, el cual se convierte también en municipio independiente. El Decreto Foral 27/2016 por el que “se aprueba la segregación de Itsaso del municipio Ezkio-Itsaso y su constitución en municipio independiente”, se aprobó el martes en en el consejo de diputados y el miércoles se publicó en el Boletín Oficial de Gipuzkoa, entrando ayer mismo en vigor. El portavoz foral, Imanol Lasa, apuntó ayer que con esta decisión “se restituye la condición que históricamente este pueblo ha sustentado”.
Las primeras celebraciones en el municipio número 89 de Gipuzkoa ya se realizaron el martes, cuando la decisión salió publicada en el Boletín Oficial de Gipuzkoa. A partir del 10 de enero, el consejo foral de diputados designará a una comisión gestora, compuesta por cinco miembros. Estos serán Gorka Sasieta y Joxe Mari Barrenetxea, hasta ahora concejales en el Ayuntamiento de Ezkio-Itsaso; Maixabel Olanga, Anttoni Okariz y Xabier Elgarresta. La gestora dirigirá el municipio hasta que se celebren las próximas elecciones municipales en el año 2019. Asimismo, el primer pleno del nuevo municipio de Itsaso se celebrará el 13 de enero, en donde se nombrará al presidente de esta gestora, que a efectos prácticos realizará las mismas funciones que un alcalde.
Lasa afirmó que, con esta decisión, “se materializa la voluntad, clara y mayoritaria”, de los vecinos de Itsaso. La consulta tuvo lugar el pasado 18 de septiembre y en la misma votaron 119 de los 140 vecinos mayores de edad y, por tanto, con derecho a voto. El sí a que Itsaso se desanexionase de Ezkio se impuso claramente con un 74% de los sufragios.
El proceso de desanexión ha durado más de tres años en los que los vecinos, el Ayuntamiento y la Diputación de Gipuzkoa fueron de la mano, aunque tuvieron que enfrentarse a un recurso del delegado de Gobierno en Euskadi, Carlos Urquijo, que finalmente no prosperó al ser desestimado por la Justicia, pero sembró incertidumbre en los días previos a la consulta popular.
“buen ejemplo” El portavoz foral, Imanol Lasa, destacó que este proceso ha sido un “ejemplo de las cosas bien hechas”, ya que ha habido “diálogo con las instituciones” y los vecinos, frente a la situación del barrio donostiarra de Igeldo, que situó en el otro extremo. En este caso, la Diputación, cuando estaba gobernada por Bildu, declaró en 2013 su segregación tras la celebración de una consulta ciudadana. En este caso “no se tuvieron en cuenta todas las sensibilidades” y serán “los tribunales los que decidan”, indicó Lasa ayer.
A partir de ahora, tanto Ezkio como Itsaso tendrán que llevar a cabo las condiciones que han pactado, así como el convenio para compartir servicios. El reparto de los terrenos tampoco supondrá ningún problema, ya que las mugas están perfectamente delimitadas con los mugarris que les separaban hace 52 años.
El camino hasta llegar a este punto comenzó en 2013 con un proceso participativo en el que se analizaron los aspectos jurídicos, logísticos y administrativos del proceso. En 2014 se realizaron estudios sobre la viabilidad jurídica y económica de la desanexión. Tras una recogida de firmas, se dio inicio al proceso de segregación y un año después el Pleno municipal de Ezkio-Itsaso aprobó el expediente de desanexión, el cual fue remitido a la Diputación, que fue finalmente la que convocó la consulta popular.
ayudas al primer sector Por otra parte, Lasa informó que en el Consejo de Diputados del martes también se aprobaron dos convocatorias relacionadas con el impulso al primer sector. La primera de ellas tiene como objetivo “reforzar las inversiones en explotaciones agrarias y el desarrollo de medio rural, fomentando su viabilidad”, señaló. La novedad de este año es que en esta ocasión ha aumentado en 500.000 euros, respecto al pasado y que se ha adelantado su convocatoria para agilizar su tramitación.
Por otro lado, se realizará otra convocatoria para “apoyar la creación de nuevas empresas por jóvenes agricultores” y así “impulsar el relevo generacional”. Esta convocatoria permitió durante este año la incorporación al sector a 19 jóvenes.