Donostia. La unidad de Investigación Alimentaria de Azti-Tecnalia ha realizado un estudio que certifica que la sidra con sello Eusko Label se diferencia del resto de las producidas en el País Vasco, ya que posee cualidades propias como "su mejor carácter de txinparta" o una mayor intensidad aromática.
Para llevar a cabo este análisis sensorial, el centro tecnológico Azti-Tecnalia ha contado con un innovador laboratorio en el que trabaja un plantel de catadores expertos y entrenados que han comparado la sidra común vasca con la que tiene el distintivo de Eusko Label. La sidra producida en Euskadi que no tiene este sello de calidad contiene mosto procedente de otros lugares.
El estudio ha demostrado que existen características que distinguen a la sidra certificada como "su mejor carácter de txinparta -burbujas de carbónico que surgen al servirla-, su mayor intensidad aromática y "una gama más amplia de matices olfativos con aspecto positivo", según informó en una rueda de prensa el viceconsejero de Pesca e Industrias Alimentarias, Jon Azkue, quien compareció acompañado por el director de Azti-Tecnalia, Rogelio Pozo.
Pozo explicó que Azti-Tecnalia "ha desarrollado una metodología específica que permite analizar y comparar, de forma objetiva, los diferentes caldos en función de 17 parámetros visuales, gustativos e incluso sonoros".
El proceso ha reunido a 18 sidras diferentes llevadas a examen por los expertos de Azti-Tecnalia, que han apreciado que "la sidra certificada aparte de tener una mayor intensidad aromática, tiene una diversidad más amplia de sabores que se prolongan en el paladar durante más tiempo y singulariza incluso su sonido de rotura".
herramienta Para finalizar su intervención, Pozo explicó que "Azti-Tecnalia pone al servicio de los profesionales "esta herramienta", con la que se puede medir la calidad del producto, con el "objetivo de ir mejorándolo y cubrir las exigencias del mercado".
La sidra con Eusko Label, cuya producción y comercialización está controlada por la Fundación Hazi, ostenta su distinción desde 2011, año en el que se vendieron 860.000 litros de sidra certificada.