Donostia. El Gobierno Vasco ha decidido concentrar el servicio de llamadas al 112 de SOS Deiak en Bizkaia, lo que significa que a partir del próximo mes de marzo operarios ajenos al territorio tomarán nota desde Bilbao de las urgencias de los ciudadanos guipuzcoanos. Desde allí, a su vez, los teleoperadores remitirán el aviso a la central de la Ertzaintza, situada en la zona donostiarra de Ondarreta.
Los 18 empleados que ahora desarrollan esta labor desde la capital guipuzcoana consideran que, con ello, "el servicio que SOS Deiak ofrece cada día al ciudadano va a empeorar, indudablemente".
Ana García, delegada de personal de los empleados guipuzcoanos, considera que, frente a la agilidad con la que ahora se desenvuelven, el traslado de las llamadas a Bilbao ralentizará la respuesta de los servicios de urgencia, como ambulancias, bomberos o la propia Ertzaintza. Su razonamiento se basa en dos aspectos: el conocimiento de los operadores guipuzcoanos de su propio territorio y el hecho de que trabajen, literalmente, codo con codo con los agentes de la Policía autonómica a los que tienen que transmitir el aviso de urgencia. Estos últimos, a su vez, se encargan de movilizar los efectivos necesarios que se desplazarán al lugar del incidente.
García describe así el cambio que puede suponer centralizar SOS Deiak en la capital vizcaina, tras la decisión tomada por el Departamento de Interior. "Por ejemplo, ahora recibo una llamada de un incendio en una calle de la Parte Vieja de Donostia y ya estoy tomando nota en el ordenador. Sin que haya terminado de escribir, le aviso a mi compañero, que es ertzaina y está al lado, para que movilice a los bomberos. Si esto mismo pasa en Bizkaia, va a coger una persona que es posible que no sepa dónde está esa calle y necesite tiempo para localizarla. Luego, redactará la urgencia y, cuando haya terminado, la enviará a la Ertzaintza en Donostia para que, desde allí, avisen a los bomberos", explica García.
La delegada de personal de SOS Deiak Gipuzkoa hace hincapié en que, si no se conocen los entresijos de los avisos de urgencias, llamar a Donostia o a Bilbao puede percibirse como una cuestión poco relevante. "Parece que es poco tiempo, pero es mucho tiempo. Ahora es inmediato, trabajamos con ertzainas que están con nosotros y tenemos médicos al lado", en referencia al ambulatorio situado en la avenida de Tolosa de Donostia.
llamadas no atendidas Preguntado por esta decisión, el viceconsejero de Interior, Raúl Fernández de Arroiabe, confirmó ayer que "lo que realmente se concentra en Bizkaia es el servicio de atención al teléfono 112", si bien los centros de coordinación de Emergencias SOS Deiak -gestionados por la Ertzain-tza- no desaparecen, siguen exactamente igual que hasta ahora, atendiendo y gestionando las emergencias de cada territorio".
Fernández de Arroiabe subraya que en Bizkaia se atenderá el 112 con el objetivo de "prestar mejor servicio, reducir el número de llamadas no atendidas y dar cobertura constante en los incidentes graves".
Pero la representante del sindicato ELA, Edurne Iriondo, subraya que el traslado de este servicio al territorio vizcaino "va a deteriorar claramente este servicio". "La rapidez de la primera llamada permite que se movilicen el resto de recursos. Hasta ahora, ese trabajo entre teleoperadores y ertzainas ha facilitado que funcione bien. Ahora, las llamadas las va a coger una persona de Bizkaia que está mucho más lejos. Esta supresión no tiene ninguna base, no se ha hecho ningún estudio de viabilidad", recalca Iriondo, quien ayer estuvo presente, junto a empleados de SOS Deiak, en una protesta por este plan que tuvo lugar junto al edificio de Ondarreta donde desarrollan su trabajo.
La portavoz de ELA señaló que la reestructuración de este servicio, que podría ponerse en marcha a mediados de marzo, va a perjudicar a los guipuzcoanos, dado que, ahora, contactan con teleoperadores que conocen el suelo del territorio. "Todos sabemos que en la geografía hay cambios debido a que hay carreteras cortadas o se han abierto nuevos viales. Con el paso de las llamadas a Bilbao, ese empleado va a tener que situar primero dónde está la calle a la que hace referencia el comunicante y, a partir de ahí, trasladarle la información a la Er-tzaintza en Gipuzkoa para que movilice el recurso", destaca Iriondo.
improvisación Por otra parte, García denuncia "la improvisación con la que trabaja el Departamento de Interior, que siempre ha dicho que iba a hacer un estudio sobre la posibilidad del traslado e iba a contar con la opinión de los trabajadores". "No han hecho nada", recalca la delegada de personal de este grupo de teleoperadoras que trabajan para la empresa Xupera XXI, subcontratada por el Gobierno Vasco.
Al margen de esta decisión, García recuerda los problemas informáticos constatados con un nuevo programa que, de momento, no ha dado los resultados esperados. "Se supone que era la panacea, pero en tres meses se ha echado para atrás porque no funcionaba y había que depurarlo", recalca.