La Guardia Urbana ha explicado, en un comunicado, que los tres ocupantes habían atrancado una puerta con un candado, por lo que los propietarios del edificio, la empresa SADE, ha denunciado los hechos ante la Policía local.
Varios agentes han acudido al lugar apoyados por una patrulla de la Ertzaintza, pero no han llegado a desalojar el edificio, sino que a las 14:30 horas los tres jóvenes que accedieron ayer al inmueble han decidido abandonarlo voluntariamente.
"No se ha procedido al desalojo, ni a la posterior detención de los jóvenes, ya que no existía requerimiento judicial", ha explicado la Policía municipal.
Según ha explicado la Policía, los jóvenes habían atrancado la puerta "para llevar a cabo un acto simbólico de protesta para denunciar lo que consideran falta de espacios culturales en la ciudad".