Eso de que somos lo que comemos es cierto en buena medida, puesto que nuestra salud depende de una manera fundamental de los alimentos. De esta forma, una alimentación variada resulta clave para que podamos disfrutar de una buena calidad de vida. Además, descubrir los secretos que esconden algunos alimentos nos proporciona una visión diferente de estos y nos permite conocer los beneficios que guardan para nuestra salud. Algunos de ellos son:
1- Higos para unos músculos en forma. El potasio es, con diferencia, el mineral más abundante en esta fruta. De esta manera, si has decidido volver a apuntarte al gimnasio o hacer algo de deporte, comer higos contribuirá a fortalecer los músculos y prevenir los molestos calambres e incluso lesiones.
2- Berros, la verdura más sana del mundo. En el mundo de los superalimentos, los reinados suelen ser cortos porque cada poco tiempo aparece uno nuevo que desbanca al anterior. El último en triunfar ha sido el berro, una verdura que, según los estudiosos de la agricultura y la nutrición, es la más sana del mundo. Esta afirmación se sustenta en que tiene un alto contenido en vitamina A y potasio, más que la lechuga típica. Y, para sorpresa de muchos, contiene más vitamina C que una naranja.
3- Pechuga de pollo para reducir el ácido úrico. Se considera la parte más saludable del pollo y la más baja en grasas, aunque precisamente por esto último a muchos les pueda parecer un ingrediente soso. Basta un poco de imaginación para darle un toque original. Esta carne, a diferencia de la mayoría, tiene la ventaja de que contiene pocas purinas, lo que ayuda a prevenir la hiperuricemia y el mayor riesgo de cálculos renales o gota que ésta conlleva.
4- El plátano ayuda a conciliar el sueño. Esta fruta puede resultar de ayuda a la hora de dormir gracias a su contenido en triptófano. Este es un aminoácido esencial precursor del neurotransmisor serotonina y melatonina, vital para el proceso de hambre y del sueño. Una ingesta adecuada de triptófano puede mejorar la calidad y la duración del descanso. Sin embargo, no es sencillo determinar la cantidad necesaria porque, según los expertos, influyen muchos otros factores en la conciliación del sueño.
5- El poder de las fresas para la función cognitiva. Las fresas son unas de las frutas que más se consumen en el Estado español, sobre todo cuando llega la primavera y el verano, que es su temporada, ya que gustan a pequeños y a mayores. Pero esta fruta tiene propiedades más allá de su sabor dulce y ácido, o de su agradable aroma. Según investigadores americanos, el consumo diario de fresas mejora la función cognitiva y la presión arterial y provoca una mayor capacidad antioxidantes, lo que potencialmente mejora la salud cardiovascular.
6- Castañas contra el estreñimiento. Constituyen un buen tentempié aportando pocas calorías y minerales imprescindibles para el buen funcionamiento del organismo como el magnesio, el potasio, el hierro y el fósforo. Pero, además, su fibra insoluble resulta saciante, regula el tránsito intestinal y combate el estreñimiento.
7- Rúcula, una opción estupenda para tu dieta. Esta verdura de hoja verde es un alimento con numerosos beneficios nutricionales. Por ejemplo, es baja en calorías, por lo que se recomienda para las dietas de adelgazamiento. Además, tiene un gran aporte de vitaminas A, C y K, así como de minerales como el calcio, el potasio y el folato, gracias a los cuales se mantiene en buena forma la salud de los huesos, la del corazón, la renal y de los ojos. Por si esto fuera poco, también facilita la digestión.
8- Arroz sancochado para alimentar tu flora intestinal. Se distingue por su color más amarillento, que adquiere al haber sido sometido a una precocción al vapor antes de ser descascarillado. Este proceso logra que el almidón de este arroz se transforme y, cuando llega al intestino delgado, facilite el desarrollo de las bacterias beneficiosas, lo que mejora la composición de la microbiota intestinal.
9- Las acelgas aumentan las defensas. Esta verdura de hoja verde es una buena aliada del sistema inmunitario gracias a su aporte vitamínico. Una ración de 200 gramos cubre el 100% de nuestras necesidades diarias en vitamina C, el 25% de las de vitamina E y el 66% de las de vitamina A. Asimismo, por su alto contenido en hierro, que se asimila mejor por la presencia de vitamina C, las acelgas nos ayudan a combatir la anemia.
10- La granada, un arsenal de antioxidantes. Desde finales de septiembre ya se puede degustar la granada, una fruta llena de antioxidantes. Incluir sus vistosos granos en la ensalada es la mejor forma de hacer un consumo diario. Por su aporte en ácido elágico, frena el envejecimiento prematuro de la piel, mejora su firmeza y previene la aparición de manchas.