La Real aprovechó uno de los pocos momentos que van a tener libre en su gira por Japón para devolver el cariño que está recibiendo por parte de la ciudad de Nagasaki y visitar su conocido museo de la bomba atómica

La expedición txuri-urdin encabezada por un emocionado Take Kubo rindió un bonito tributo a los 74.000 fallecidos por el ataque nuclear americano que acabó con la Segunda Guerra Mundial en su 80 aniversario. 

Los jugadores se mostraron muy “impactados” por la explicación de lo sucedido y los testimonios e imágenes que se recogen en el museo. 

Ofrenda

Después, bajo un sofocante calor como no podía ser de otra manera, los blanquiazules se han acercado hasta el lugar exacto donde cayó la bomba para hacer una ofrenda floral encabezados por el vicepresidente Mikel Ubarretxena, el entrenador Sergio Francisco, los capitanes Aritz Elustondo e Igor Zubeldia, y Kubo delante de la imponente estatua que han levantado en nombre de la paz.

La Real visita el Museo de la Bomba Atómica de Nagasaki

La Real visita el Museo de la Bomba Atómica de Nagasaki Mikel Recalde

El beasaindarra, que dedicó unas palabras a los medios japoneses, reconoció estar impresionado antes de regresar al hotel: “La verdad es que al ser el 80 aniversario tanto el club como los jugadores hemos sentido ese deber de venir aquí e intentar ofrecer nuestro respeto al pueblo de Nagasaki y a todos los trabajadores del museo. Es algo bonito y diferente. Hemos tenido suerte de poder venir con la Real porque si no igual era complicado que estuviéramos aquí. Nuestro máximo respeto a las familias de los fallecidos y totalmente agradecidos por el trato”.