Aunque la Liga finalizara hace casi mes y medio, el mercado estival se encuentra bastante parado para la Real Sociedad debido a la celebración de la Eurocopa. De hecho, la única operación que el club txuri-urdin tiene acordada es la del fichaje de Sergio Gómez, por el que pagará al Manchester City cerca de 9 millones de euros, además de que la entidad inglesa se reserva el 25% de la plusvalía de una hipotética venta de un jugador que firmará por las próximas seis temporadas con la institución que preside Jokin Aperribay. Y en lo que hace referencia al resto de frentes que la Real tiene abiertos, aún no existe una decisión definitiva aunque alguno de ellos esté avanzado.

En lo que respecta al capítulo de salidas, los nombres que que figuran como destacados en la agenda de la dirección deportiva de la Real Sociedad son los de Robin Le Normand y Mikel Merino, dos jugadores que precisamente están sobresaliendo en la Eurocopa con la selección estatal. Y en ambos casos, los dirigentes del club txuri-urdin quieren escuchar de su boca lo que quieren hacer antes de tomar las decisiones correspondientes, según ha podido saber NOTICIAS DE GIPUZKOA. Es decir, al término del campeonato continental que están disputando, se reunirán con ambos futbolistas para conocer de primera mano su intención y si verdaderamente desean marcharse de la Real.

Le Normand

En el caso de Le Normand, la sensación que tienen en la planta noble de Anoeta es de que acabará marchándose, pero no rubricarán ningún acuerdo antes de escuchar al propio defensa galo. La oferta que tienen sobre la mesa del Atlético de Madrid, que asciende a unos 30 millones de euros como cantidad fija, además de un montante cercano a los 5 millones en concepto de diferentes variables, satisface a la Real porque entienden que está ajustada al mercado, pese a los 60 millones de euros que figuran en su cláusula de rescisión, pero van a esperar a que se pronuncie el jugador a pesar de que los contactos viene produciéndose desde hace varios meses. Concretamente, sus agentes vienen presionando desde el mes de abril, pero el francés ha dejado claro que hasta que no concluya la Eurocopa no se pronunciará y que está muy agradecido al club que le acogió en 2016 y le dio la oportunidad de debutar y crecer en la Liga hasta ser titular con el combinado español tras nacionalizarse.

Le Normand, el mejor central de la plantilla realista en los últimos tiempos, dejará una vacante importante que cubrir, pero en Zubieta confían en la gran progresión exhibida por el joven Jon Martín, que con 18 años debutó a las órdenes de Imanol Alguacil en el tramo final de la temporada pasada en el decisivo partido contra el Betis del Benito Villamarín, además de en los otros tres centrales con los que cuentan en el plantel, Igor Zubeldia, uno de los fijos del técnico oriotarra, Jon Pacheco, que ya ha venido disfrutando de minutos de calidad, y Aritz Elustondo, que es quien menos oportunidades ha tenido últimamente.

En cualquier caso, la Real no tiene ninguna prisa y, tras reunirse ya dos veces con el Atlético, en sendas citas en las que dejaron claro a su interlocutor que no tienen ninguna necesidad de cerrar con celeridad el acuerdo, será determinante la reunión que mantengan con el propio Le Normand a su vuelta de la Eurocopa, aunque su marcha, como ya hemos mencionado, parece evidente y el club no la vería con malos ojos en las condiciones económicas comentadas.

Merino

La situación de Mikel Merino, aunque es diferente porque su contrato expira al término de la próxima campaña, no varía demasiado en lo que al planteamiento de la Real concierne. En primer lugar, quieren citarse con el jugador para escuchar de su propia voz si realmente quiere marcharse. Y aunque en Anoeta quieren tomárselo con tranquilidad, de ser así su respuesta, podrían aceptar una de oferta de concretarse el interés que han mostrado por él (existe la intención de formalizar una propuesta en firme) o también se puede dar la circunstancia de que el club blanquiazul opte por que finalice su contrato de txuri-urdin aunque no perciba compensación económica alguna.

Así las cosas, la sensación, en el caso del navarro, es de que no aceptará la propuesta de renovación, en palabras del club “muy buena”, tras no producirse nuevos contactos en los últimos tres meses, y o bien terminará marchándose porque se encuentra en un momento de su carrera deportiva en el que puede firmar su contrato más importante y la Real podría hacer caja, aunque no, lógicamente, en los mismos términos que Le Normand, o bien finalizará su contrato jugando su último año en el curso que comenzará el próximo 16 de agosto.

Por lo tanto, la decisión todavía no está tomada, pero, tras escucharle una vez finalice su concurso en la Eurocopa, también se despejará su futuro.

AMBICIÓN A FUTURO

Estas operaciones, en cualquier caso, ayudarán para formar una plantilla con la que la Real se clasifique “recurrentemente para la Champions League”, y disputar la máxima competición continental de clubes no sea flor de un día, tal y como desprenden desde el Consejo de Administración de la entidad txuri-urdin. No obstante, claro está, que la posible salida de Mikel Merino significaría que la dirección de fútbol maniobre para reforzar la plantilla en esta parcela del centro del campo. El pamplonés ha sido un jugador determinante para lograr las cinco clasificaciones de forma consecutiva para disputar un torneo europeo, que han supuesto un hito en la Real Sociedad.