No era un partido con gran cosa en juego una vez la Real Sociedad y el Atlético de Madrid habían certificado sus objetivos principales en Liga semanas atrás. Aun así, puesto el balón a rodar los jugadores de ambos equipos querían llevarse el partido. Más aún siendo el último de la temporada. En el caso de los guipuzcoanos, además, en casa. En el caso de los visitantes, porque llegaban de un desastroso partido ante su afición, en el que perdieron contra Osasuna (1-4).

Por eso, no era de extrañar que a lo largo y ancho del campo parejas de jugadores hayan tenido sus más y sus menos. Uno de esos dúos ha sido el compuesto por Take Kubo y el exjugador realista Antoine Griezmann. En uno de esos lances, ya en la segunda parte, parte de la grada Aitor Zabaleta ha gritado "Griezmann, muérete", un cántico que rápidamente ha sido respondido por buena parte del estadio con silbidos, que han tapado esos gritos.

El jugador nacido en Macon pasó por la cantera realista (Cadete Txiki, Cadete, Easo y Real Juvenil) antes de que en la pretemporada de 2009/2010 Martín Lasarte echara de él ante las bajas en la zona izquierda del campo. Llegó y convenció: la última temporada en Segunda fue la primera de Griezmann en la dinámica de un primer equipo que abandonó en julio de 2014, con destino al Atlético de Madrid.

Fue protagonista de uno de los mejores traspasos de la historia realista, que fijado en 25 millones iniciales, las plusvalías posteriores multiplicaron el valor de la salida las siguientes temporadas.

Aunque se ha rumoreado en distintas ocasiones el regreso de Griezmann a Anoeta, estos rumores parecían más propios de deseos que realidades fundamentadas, puesto que tras su peculiar periplo en Barcelona, regresó al Atlético hace tres años.