“Nos va a venir muy bien”, suspiró Imanol durante su rueda de prensa posterior al partido contra el Rayo. Ante los vallecanos, su Real Sociedad dejó bien a las claras que ahora mismo no sobran las energías en la escuadra txuri-urdin, afectada por internacionalidades, lesiones y sanciones. Pero no es solo eso: los futbolistas que pisan el verde tampoco se encuentran en plenitud, quizás solo alguno como Turrientes. Así, el equipo se resiente de todo ello encuentro tras encuentro, de forma cada vez más acusada. Por eso le preguntaron al técnico txuri-urdin cómo sentaba disfrutar ahora de una semana limpia de compromisos. El oriotarra, lógicamente, hizo una valoración muy positiva al respecto.

Entre septiembre y diciembre, la Real disputó las seis jornadas de la fase de grupos de la Champions, clasificándose para jugar este próximo mes los octavos de final (mínimo ocho partidos). Y en la Copa del Rey, mientras, los blanquiazules han superado las cinco rondas (a partido único) afrontadas hasta la fecha, ganándose así el derecho a competir en unas semifinales a ida y vuelta: en total, siete citas en el torneo del K.O., al margen de una hipotética final. Las cuentas salen solas, pues ocho más siete suman quince, la cifra de encuentros ajenos a la Liga con la que la propia Real se plantará a sus espaldas en el próximo parón internacional de marzo. Se trata de una auténtica barbaridad.

Entrenador y futbolistas insisten en que lucharon y luchan para conseguir calendarios tan apretados como el descrito: “Esto es lo que queríamos”. Pero, llegados a este punto y viendo lo justa que ha llegado la Real a sus últimos compromisos, conviene también echar la vista atrás y analizar la carga que acumula el equipo durante el presente curso. Eliminando de la ecuación las interrupciones por selecciones y la navideña, la escuadra guipuzcoana solo ha podido vivir esta campaña cuatro semanas limpias, y tres de ellas datan de agosto, cuando como quien dice la pretemporada no había terminado aún. La restante corresponde a este mismo enero, justo antes de visitar al Athletic en el derbi. Por lo demás, cuando los torneos de clubes han estado en marcha, siempre ha tocado compaginar los miércoles con los domingos, con un total de trece compromisos intersemanales.

De aquí a marzo

Como consecuencia de la buena trayectoria realista durante el actual ejercicio, la agenda de aquí al mencionado parón de marzo resulta de armas tomar. Quedan aún siete semanas para que llegue la mencionada interrupción, y en cuatro de ellas va a tocar vestirse de corto: así sucederá por partida doble contra el Mallorca (Copa) y PSG (Champions), quedando al menos tres desahogos que aportarán tregua y de oxígeno. El primero llega ahora, en la antesala de la visita al líder Girona el próximo sábado. El segundo se producirá a mediados de febrero, entre el partido de Liga en Son Moix (domingo 18) y el duelo en Anoeta contra el Villarreal (sábado 24). Y tampoco habrá partido después de jugar contra el Granada en tierras andaluzas (10 de marzo) y antes de recibir al Cádiz en Donostia (día 17).

Le evolución de los lesionados, los percances físicos que se puedan producir y el regreso de los internacionales determinará cómo puede jugar Imanol sus cartas en este período.