Ha sido insistente y raya lo obsceno. Cada vez que esta temporada el FC Barcelona se ha enfrentado a la Real, el nombre del jugador donostiarra Martin Zubimendi ha aparecido en la sala de prensa barcelonista. Periodistas que cubren la información del club blaugrana o, directamente, miembros de la estructura blaugrana han sacado a pasear sus preferencias respecto al donostiarra, como este mismo viernes Xavi Hernández: lo quieren ya en Can Barça, pero no tienen dinero.

Con una situación económica que la mayoría de clubes (y empresas de todo tipo) no hubiera podido soportar, el Barcelona y su entrenador ansían incorporar a Zubimendi como sustituto perfecto de Sergio Busquets, que ha anunciado su salida del club catalán. Lejos del poderío de otras épocas, la nefasta gestión de la última década, escondida por los éxitos en el césped, han llevado al Barcelona a una situación límite. Tanto que debe reducir en unos 200 millones su tope salarial. El 30 de abril todos los clubes debieron enviar a LaLiga la documentación necesaria para que la patronal fije los topes de la temporada 2023/2024. El Barça, que también quiere fichar a Messi, es uno de los clubes que más espera las indicaciones del organismo que preside Javier Tebas.

La campaña culé tomó forma en agosto de 2022, a las puertas del choque de Anoeta. La prensa catalana calificó al pivote donostiarra como el “elegido” para relevar a Busquets, pese a que al centrocampista catalán aún le quedaban meses para desvelar su futuro. En una entrevista con NOTICIAS DE GIPUZKOA, Zubimendi se mostró ajeno a aquellos rumores: “Es en la prensa, no sé hasta cuándo es verdad y cuándo no. A mí no me ha llegado nada específico así que ya sé que los rumores van y vienen, sobre todo en verano. Lo tomo como algo positivo, en el caso de que pueda ser verdad”.

En aquella ocasión, semanas en las que el Barcelona calculaba y recalculaba palancas para intentar no reforzar su primera plantilla, Zubimendi sí reconoció que “la tranquilidad que me da saber que mi club está en buenas manos, está en buena dinámica económica, eso no se cambia por nada”.

Se cerró aquel mercado de fichajes, vacile de Brais Méndez mediante, y fue cuestión de semanas para que Zubimendi se enfundara una chaqueta, acudiera al despacho de Jokin Aperribay en Anoeta y sellara la renovación hasta 2027. Las aguas volvían a su cauce… hasta la eliminatoria de Copa en el Camp Nou.

“¿Quién es Martín Zubimendi y por qué le gusta tanto a Xavi Hernández?”, se preguntaba en su sección de Deportes el diario Ara después de que el entrenador barcelonista ya empezara a valorar al pivote donostiarra en rueda de prensa previa al partido de cuartos de final. Venció el equipo local, pero Imanol Alguacil todavía tuvo que responder una pregunta sobre Zubimendi, ya que comparecía en el Camp Nou.

“¿Usted sabe de sus planes de futuro, y sobre todo, lo ve capacitado para jugar en un grande de los grandes, como es el FC Barcelona?”, preguntó un periodista, a lo que Imanol respondió con claridad meridiana: “Perdona, con todo el respeto, pero es que para mí la Real Sociedad es el equipo más grande”.

El tercer episodio vuelve a coincidir con un duelo entre culés y Real. A las puertas del partido del Camp Nou, en el que el equipo realista se juega la Champions (lo que haría de la Real un club más apetecible), el propio Xavi Hernández, que glosó las cualidades de Zubimendi en enero, no tuvo ningún reparo en dar un paso más tras anunciar que "el fichaje de un pivote defensivo es prioritario" y asegurar que, además de ser “un pivote extraordinario, domina la fase con y sin balón, y es ganador de duelos”, añadir que “entiende muy bien el fútbol que nos gusta aquí”.

No solo él: la prensa catalana se llena de titulares de ofensiva. “Zubimendi, el invitado más oportuno” (La Vanguardia), “Xavi empuja con Zubimendi pero la Real Sociedad se cierra en banda” (Relevo) o “Martin Zubimendi: 60 millones de razones para lucirse hoy” (El Mundo Deportivo) jalonan una previa ante la que el técnico de la Real, Imanol Alguacil, no se anduvo con tonterías cuando le preguntaron por las palabras de un Hernández que quiere a Zubimendi: “No te puedo contestar porque no lo sé, igual se lo pregunto mañana y a ver qué me contesta”.

En el caso de que haya algún movimiento serio por parte del club culé, la afición de la Real seguirá muy de cerca los pasos que den la entidad realista y el propio Zubimendi, que prolongó su contrato hace escasas fechas con la misma cláusula de rescisión. Los episodios que ha protagonizado el club blaugrana respecto a la Real en la última década larga (sobre todo, desde la celebración del Centenario) han dejado más que tocada la sintonía que existía entre realistas y blaugranas, por lo que la afición realista desaprobaría cualquier facilidad al club culé. Pro de pronto, la Real ha situado a Zubimendi en el centro del cartel anunciador del partido del Camp Nou, escoltado por Asier Illarramendi y Mikel Merino. Todo un mensaje.