Josema Hernando y Dámaso Fernández son los jauntxos de la expedición. Los aitonas. Los dos liderarán, o tratarán de hacerlo, un viaje con sus respectivos hijos Aitor y Urdiñe y sus nietos Aren, de dos años, y Paul, de poco más de un mes de vida. Como voz de la experiencia, Josema reconoce que le ilusiona mucho el viaje: “No estoy nada nervioso. ¿Por ir a Roma? Esto no es nada para nosotros. Los únicos nervios que tengo es porque voy con niños. Por lo demás estoy muy tranquilo. Son de mal dormir y vamos a estar todos en un apartamento, Dios dirá”.

Su hijo Aitor es el héroe de la película junto a su pareja Urdiñe. A tranquilo no le gana nadie: “¡Está mucho más acojonado el abuelo que nosotros! Fue mi pareja la que tuvo la idea: ¿Por qué no nos vamos todos a ver el partido?”. Dicho y hecho.

La aventura partirá de Lasarte-Oria este miércoles de buena mañana: “Saldremos a primera hora, hacia las ocho de la mañana para andar con tiempo. Si hay alguna casqueta de camino, tendremos que parar. El avión sale de Lourdes-Tarbes a las 12.40 horas. Son dos horitas, pero vamos sin prisa”, afirma Josema. “Vamos en dos coches, porque como estamos de baja por paternidad nos quedamos hasta el martes para conocer mejor Roma”, explica Aitor.

Josema reconoce que le emociona el plan, aunque va a echar de menos a las bajas: “Estoy muy orgulloso. Solo me falta la hija, pero no puede por trabajo. Lo intentó hasta última hora, pero el viaje se le había puesto por las nubes. Yo, por ejemplo, me vuelvo antes, el sábado, y ya me salía más de 300 euros más caro. No podía coger más días por cuestiones familiares y por no dejar sola a Tere, mi mujer”. “Hemos reservado un piso en el centro de la ciudad. Nosotros cuatro dormimos en una habitación, mi aita en la otra y mi suegro, que fue el último en apuntarse, dormirá en un sofá-cama”, explica Aitor.

En lo deportivo, el bache de la Real ha bajado el suflé: “Yo no he visto a la Roma, pero sí que me entró la preocupación el otro día cuando leí a la gente de la Real en Twitter hablando sobre el partido. Llevamos tres partidos contra rivales que no quieren jugar”, afirma el aitona. Su hijo tiene una opinión más formada del rival: “Le vi el otro día contra la Juventus. Me pareció el típico equipo de Mourinho que juega a la contra y te castiga el fallo”.

Josema reconoce que tiene plena confianza en Imanol: “Alguna estrategia nueva seguro que tiene guardada por ahí. Ya cambiará algo, después de ver que las cosas no le están funcionando tan bien últimamente. Yo soy muy optimista, como siempre. Y si no, buena pasta, buena pizza y a pasarlo bien. A comer todos spaghetti”.

Optimismo El tema en el campo tampoco parece perturbarles en exceso: “Mi nieto va a ir con un mes y diez días, pero ya nos han dicho que es una afición tranquila, que no va a haber líos. Tienen pinta de animar mucho. A mí me gusta el fútbol así, que haya ruido en el campo”. Aitor sabe lo que le espera: “El mayor no parará quieto, como cuando está en Anoeta. No se le va a hacer extraño. Y el pequeño ni se va a enterar. El club no nos ha puesto ninguna pega, con tal de que les identifiques... Y que pagues, claro”. Eso sí, de mayor ya tendrá una buena anécdota para contar cuando le discutan a ver quién es más de la Real…

A pesar de las reticencias por el momento del equipo, los dos son optimistas. Josema pronostica un “2-1 perder. Y luego ganar 2-0 en la vuelta”. Aitor se envalentona y se viene arriba: “0-1 gana la Real. Y en la vuelta 1-1”.

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Viaje a Roma: qué ver y hacer en 72 horas N.G.