La Real Sociedad ha abierto al público un entrenamiento celebrado en Anoeta un sábado por la mañana. Y, como era de esperar, la afición ha respondido acudiendo al estadio, pese a tener que hacerlo en una jornada desapacible en lo meteorológico. La grada Este ha presentado un notable aspecto durante la práctica, poblada principalmente por familias cuyos integrantes más jóvenes esperaban al final de la sesión para cazar autógrafos y fotografías. Los futbolistas e Imanol Alguacil han correspondido a las peticiones y han comprobado de primera mano que la hinchada tiene ganas de fútbol y de Real, un hambre que el calendario próximo en el campo blanquiazul va a contribuir a paliar.

Lo cierto es que la parroquia vive estas semanas una inusual travesía del desierto. En plena época de competición y sin mediar el habitual parón de todos los veranos, los hinchas realistas se enfrentan a un período de casi dos meses sin asistir a partidos oficiales, durante noviembre y diciembre. Su última cita casera con el equipo se dio el domingo 6 de noviembre contra el Valencia (1-1). Y la próxima, mientras, llegará el próximo día 31, contra Osasuna (16.15 horas). Al menos, el amistoso del sábado que viene contra el Anderlecht belga (19.00 horas) contribuirá a amenizar la espera, siempre y cuando la oferta televisiva del Mundial lo permita. Si se cumplieran los pronósticos en octavos de final, la tarde del partido de preparación txuri-urdin coincidiría con un España-Portugal (16.00 horas) y un Francia-Inglaterra (20.00).

Sea como sea, cuando la afición recupere por fin ese gusanillo que le generan los encuentros oficiales en casa lo hará con todas las de la ley. El menú que se atisba en el horizonte de Anoeta resulta muy atractivo, comenzando por el mencionado duelo local contra Osasuna y continuando por el que apunta a significar el siguiente compromiso en Donostia. El fin de semana del 14 y el 15 de enero la Real recibirá al Athletic en el primer derbi liguero de la campaña, un encuentro que aún no tiene fecha ni hora. Los seguidores, eso sí, pueden ir descartando ya que el partido entre txuri-urdin y rojiblancos se juegue el domingo a última hora. Para entonces está prevista la final de la Supercopa de España, y la Liga nunca contraprograma este partido. Así, el derbi vasco tendrá lugar el sábado 14 de enero o el domingo 15 por la tarde, a las 14.00 o a las 16.15 horas.

¿Queda ahí la cosa? Quizás no. Quizás la agenda en Anoeta para las próximas semanas se vea abrillantada por la Copa del Rey, una competición que durante las últimas temporada ha traído de vuelta al estadio toda la emoción del torneo del K.O. Si la Real supera al Coria en la próxima ronda y el resto de equipos de Primera hacen también los deberes, exisitirá ya la posibilidad de que los de Imanol se midan en dieciseisavos (4 o 5 de enero), en casa, a un rival de la máxima categoría (así sucedió en el curso 2019-20 contra el Espanyol). 

Dicha ronda sigue siendo, en cualquier caso, muy susceptible de llevar al equipo blanquiazul lejos de Anoeta para medirse a una escuadra de Segunda. Aunque, de superarse también el encuentro en cuestión, con los octavos de final llegaría ya el turno de duelos trascendentales y a cara de perro contra aspirantes al título. Cabe recordar que en la pasada campaña pasaron por Anoeta el Atlético de Madrid (19 de enero) y el Betis (3 de febrero) en duelos que podrían repetirse de aquí a solo mes y medio.

ENTRENAMIENTO CON LOS MISMOS SEIS AUSENTES

La plantilla de la Real ha llevado a cabo este viernes en Anoeta un entrenamiento que no ha deparado novedades respecto a la víspera. Se han ausentado los mismos seis futbolistas que causaron baja el viernes. Así, no han pisado el césped del estadio los lesionados Mikel Oyarzabal, Ander Barrenetxea, Aihen Muñoz y Sadiq Umar, Tampoco lo ha hecho Alexander Sorloth, quien disfruta de unos días de descanso adicional tras sus partidos de noviembre con Noruega. Y ha faltado igualmente el mundialista Take Kubo. 

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Hambre de Real en Anoeta (Galería de imágenes) Marco Rodrigo