Kortabarria, capitán de la Real, la portaba con la mano izquierda; Iribar, su homólogo en el Athletic, la sostenía con la derecha. Tras ellos, ordenados en sendas filas, sus compañeros de equipo, con Atotxa como escenario de lujo. Aquel 5 de diciembre de 1976, el recordado campo de Duque de Mandas vivió un acontecimiento histórico con la Ikurriña como principal protagonista, una bandera que, por aquel entonces, estaba prohibida. Aquel derbi supuso la gran reivindicación. 45 años después de aquel acontecimiento, uno de los protagonistas, Xanti Idígoras, rememora para NOTICIAS DE GIPUZKOA, "una fecha para enmarcar".

"Ese partido tiene su historia", comienza señalando. "Se produjo en un momento muy complicado que vivíamos aquí. Fue emocionante todo lo que pasó, cómo fue y cómo reaccionó el público de Atotxa. Es una fecha para enmarcar y para guardar en la memoria", reconoce el que fuera exjugador de la Real. Fue uno de los muchos jugadores que se enteró en el vestuario. "La mayoría de los jugadores que estábamos allí nos enteramos en ese momento. Es cierto que algunos que ya sabían lo que se iba a hacer y en el vestuario se comentó lo que se iba a hacer. En ese momento, todos decidimos ir a delante, pasara lo que pasara", segura con orgullo Idigoras.

La fiesta, para la afición de la Real fue completa, porque su equipo, además, se impuso por 5-0 al eterno rival gracias a los dobletes de Satrústegui y Gaztelu, y al tanto de Zamora. "Fue todo fantástico, la ikurriña, el momento, la celebración, y luego ganar 5-0 al Athletic. Fue un partidazo", sostiene el exfutbolista, consciente del potencial de aquella escuadra dirigida por Irulegui: "En ese momento se estaba creando ese gran equipo que luego se hizo y que ganó las Ligas".

Idigoras no duda en afirmar que aquel 5 de diciembre de 1976 fue "uno de los momentos más especiales" de su carrera. "Están la liga, el debut de la Real en Vigo, que es el sueño de todo jugador de aquí, jugar una Olimpiada, la de Montreal, y luego ese partido, con la ikurriña, que sirvió para que fuera legalizada y se pudiera poner tranquilamente en cualquier sitio".