- Minuto y resultado.

-Creo que estamos bien. Se cumplió el objetivo del año o el principal, que era ganar el título de Copa, y ahora estamos 100% mentalizados en conseguir la quinta plaza o los puestos europeos. El equipo se siente bien, aparte de las bajas que tengamos, los que estamos entrenando seguimos concienciados en lo que tenemos que conseguir.

Tenían claro que eran vitales estas dos victorias seguidas...

-Hombre, empatas contra el Athletic, se te escapan dos puntos en Mestalla... Sabíamos que necesitábamos sumar de tres en tres para seguir ahí. Betis y Villarreal están muy bien, no van a fallar mucho y si nuestro objetivo es estar entre los primeros tenemos que ganar partidos. Ahora afrontamos otros dos partidos que creo que nos pueden acercar un poco más al objetivo.

La sensación que ofrecen muchas veces es que están muertos...

-La temporada se hace larga y más cuando ha habido tantas bajas, recaídas€ Pero no creo que se note tanto. Creo que es por la intensidad a la que jugamos. Somos conscientes de que quedan cinco partidos en los que dar lo máximo, y luego cogeremos las vacaciones con los brazos abiertos. El equipo está respondiendo, nos quedan cinco finales y a por el objetivo.

El mérito es increíble: muchas bajas, cambio de estilo...

-Igual tuvimos mucho éxito con nuestra manera de jugar a principio de la temporada pasada y de esta. El equipo ha estado haciendo un muy buen juego, pero la campaña va pasando y los rivales te van conociendo. Hay partidos en los que no toca tener tanto balón o no arriesgar tanto en nuestro campo. Tenemos diferentes automatismos. Podemos jugar con Remiro jugando arriba para buscar las caídas. Se suelen ver diferentes encuentros dependiendo del rival que te toque y el equipo tiene claro que puede jugar de distintas maneras. Como los partidos de Ipurua suele haber varios y son siempre iguales. El campo, aunque no sea tan pequeño, parece que te someten y que tienes que estar sacando balones del área, y las pocas ocasiones que generamos intentar materializarlas. El lunes con un gol nos sirvió pero a veces perdonas y acabas pagando.

La Conference no les llama...

-No es que no nos interese, es que somos ambiciosos y somos conscientes de que hay plantilla para conseguir la quinta plaza. Llevamos mucho tiempo en esas posiciones europeas. El equipo es consciente de que lo puede conseguir y quiere lo mejor, que es el quinto puesto. Luego al final de temporada se verá en que posición nos quedamos. No es que no nos importe el torneo, pero si podemos conseguir ese puesto europeo superior, mejor.

En esa ambición, solo les queda llegar más lejos en Europa y aspirar a entrar en Champions...

-Creo que llevamos dos temporadas muy buenas de la mano de Imanol. En todo momento nos ha plasmado cómo ha querido jugar, y en eso tiene muchísimo mérito él y el grupo. Hemos tenido claro lo que nos pedía y jugando de esa manera hemos conseguido lo que hemos conseguido. El año pasado ganar todos los partidos de Copa y este año terminar ganándola. El posconfinamiento fue duro porque hubo muchísimos partidos malísimos, que no conseguíamos la victoria, los rivales se acercaban, pero al final se consiguió el objetivo. Y este año tenemos muchísimo mérito porque llevamos tiempo en puestos europeos y hay que darle valor. Incluso hemos sido líderes varias semanas. Un segundo año seguido en Europa sería terrible.

¿Se habla poco de Imanol?

-Se habla bien de todos, no solo del staff sino de toda la plantilla. Hacía muchísimo tiempo que igual no había esa ilusión de optar por segundo año consecutivo a puestos europeos. La afición se conformaba con entrar cada equis años y ahora lo que buscamos es que se convierta en una rutina. Aspirar a las mejores posiciones, que Europa sea recurrente y que sea todos los años un objetivo principal.

Explíqueme el nivel de carcajada cuando le vieron en la rueda de prensa de La Cartuja

-Hombre, no te imaginas que se fuese a poner así pero lo hizo, olé él. Yo le conozco muy bien, por suerte. Como muchos jugadores de la cantera siente los colores y la Real sabiendo su cargo, y el peso que tiene en el club y en el equipo, pero se lo toma como un aficionado también. Sacó todo lo que tenía. Nos descojonamos una barbaridad porque no nos lo esperábamos y porque nunca se había visto algo así. Ya dijo que se ponía en modo forofo, olé por él.

El nivel de la zaga es magnífico...

-Lo que teníamos claro es que el club confiaba en los que estaban ahí, no solo en los cuatro que jugamos sino también Urko, Pacheco, Arambarri€ Creo que ya lo dije, el día que salió Diego pensé que el club va a traer a alguien, pero nos demostró esa confianza y creo que el año está siendo bueno en general. Es verdad que hemos recibido seis goles contra el Barça y algún que otro partido en el que hemos cometido errores, pero el global es bueno, no solo en defensa sino en todo el equipo. Defendemos once y atacamos once y eso nos ayuda mucho. Lo hemos trabajado mucho en Zubieta con la línea de cuatro y el pivote y el año está siendo positivo. Hemos dado un paso al frente y nos está yendo bien. Hubo partidos en los que no nos han hecho ocasiones y eso es mérito de todos.

¿Sorprendido del rendimiento de sus compañeros?

-Te lo esperas porque si están ahí es por algo. Creo que ya el año pasado se intentó hacer lo que nos pedían Imanol, Labaka y Ansotegi, y poco a poco hemos cogido los automatismos. Se ha visto que muchas veces al apretar tan arriba el año pasado puede ser que pecáramos y hubiese muchos unos contra uno al estar muy expuestos, pero este año las vueltas están siendo muy buenas y se está viendo a todo el equipo comprometido.

Monreal ayuda a cerrar...

-¡Qué te voy a decir de Nacho! Con la experiencia que tiene y la madurez como profesional poder tenerlo en banda es una maravilla. Estás 100% seguro de que pocas veces se van a ir de él y nos da mucho. Creo que él también está muy a gusto aquí porque se le nota disfrutando en el campo. Solo ver las imágenes de sus lloros tras levantar la Copa ya lo dice todo del tipo de persona que es y de cómo lo siente.

La salida cantando puede ser "su gran noche"... Memorable.

-Lo malo de las cámaras (risas). Mira qué bonito ha quedado todo, de cómo han sido esos dos días, la celebración. Son cosas que nos salen del alma y se va a quedar en el recuerdo para siempre.

Cuéntenos algo que no se vio...

-Lo bueno de todo es que pudimos estar un buen rato celebrando. Es muy difícil ganar un título y no poder celebrarlo con la afición, no poder estar en el bus por toda la ciudad, es triste. Manda huevos también que ganes una final de Copa y te pille una pandemia...

La imitación de Jesús Vidal mientras hacían los gin tonics...

-Ni lo probé... Soy un poco cabrón y me fijo mucho en diferentes personas y sé imitar a unos cuantos. Me salió, me medio obligaron a hacerlo porque desde que vino a conocernos, que fue un placer, en todo momento si me salía una imitación era a buenas y antes de la final la Real subió a Instagram un vídeo suyo animándonos y qué menos que acordarnos de él. Tengo unos cuantos a los que imito, ellos lo saben, lo hago delante de ellos, pero es secreto.

Es un digno heredero de Zuru y Pardo para las risas...

-Siempre me gusta tener buen ambiente en el vestuario. Ser un poco cachondo, pero cuando toca estar serio y concentrado también me gusta, que me escuchen y que se me haga caso. Y cuando estamos de broma, que se rían conmigo.

Ganar era esto. ¿Lo era?

-Ganar era esto pero me faltó dedicárselo a toda Gipuzkoa que estaba detrás, que fue a despedirnos a Zubieta, al aeropuerto€ Cuando se pueda algo tendremos que hacer algo porque se lo merece todo el mundo y fue inolvidable.

¿Lo disfrutó al máximo pese a no poder jugar de inicio?

-Sinceramente, el día que me pasa eso en Turín, el objetivo era llegar a la final, pero mi idea era participar en algunos partidos antes o algunos minutos para ver que estaba preparado. Casualidad o no, pero dos semanas antes de la final empecé a entrenar con el equipo, no me encontré muy allá, pero de la noche a la mañana dejó de dolerme el tobillo, entrené sin molestias y veía el objetivo de llegar, pero no estaba ni para jugar los 90 minutos. Me tuve que conformar con jugar aunque sea seis, me hubiese gustado estar en el once, pero tenía que asumir mi rol de que no podía ser titular y tuve la suerte de estar convocado y de salir, por lo que contento con esa parte, y lo saboreé por la parte que me tocó.

¿Las lágrimas de Turín era porque temía perderse la final?

-No. No había sentido tanta impotencia, rabia e ira en mucho tiempo. Estaba delante de un equipazo como el United, eran unos dieciseisavos de final de la Europa League, poder jugar con el equipo de tu vida, estás en el calentamiento sufriendo y que no puedas entrar en el once, porque encima el míster confía en ti€ Sinceramente no me esperaba que el tobillo se pusiera así, porque el día anterior entrené normal y eran lágrimas de mucha rabia, no estaba pensando para nada en la final porque quedaba muchísimo tiempo, pero no me esperaba tener que salir del calentamiento. Hacía tiempo que no tenía esa sensación, me di cuenta que no podía con ese tobillo...

Llegó a imaginar un gol suyo en la final para su aita...

-Te viene a la cabeza de vez en cuando y tampoco es malo, pero mi principal objetivo era llegar a la final, tuve la suerte de jugar esos seis minutos y levantar el título fue la hostia.

¿Echo de menos a mucha más gente aparte de la afición?

-Creo que hay que darle mérito, y muchísimo, a la generación que, cuando el equipo estaba en una situación muy muy difícil en Segunda, hizo todo lo que hizo para que la Real llegue a donde está ahora mismo. Ellos son partícipes de esto. En los peores momentos dieron la cara, ascendieron y llevaron al equipo a la Champions, y sí que les eché de menos.

¿Qué le pasa a ese tobillo?

-No lo sabemos, si lo supiese te lo diría. Todo me empezó con un golpe en octubre o noviembre, antes de medirnos al Betis. En el entreno me llevé un golpe que me hizo una cosa extraña, pero el dolor lo sentía por dentro. Me dijeron que era un edema óseo y estuve jugando con el tobillo así mucho tiempo. Luego me pasó lo del Nápoles en casa, aunque la semana siguiente ya estaba disponible. En Navidades empecé con dolores que no había tenido hasta ahora y se me fue hinchando hasta que tuve que parar. El cuerpo dijo basta y tardé un mes y pico en recuperarme. Jugué cinco partidos, hasta que en Getafe tuve un gesto raro como de torcerme el tobillo y ese puede ser lo que me pasó en Turín. El lunes me sacaron algo de líquido, el miércoles entrené sin dolor y el jueves ya pasó lo que pasó.

¿Tiene miedo al quirófano?

-Si tengo que pasar, pasaré. Tengo claro que esto me está sirviendo para estar con el equipo y ayudar en el verde. Desde la final he jugado y estoy entrenando con el grupo. Ahora mismo no me lo planteo porque me encuentro bien, pero soy consciente de la inestabilidad que tengo por mi forma de pisar, lo sé de toda mi vida. Por eso hago mis trabajos de tobillo y de fuerza antes de entrenar. Ahora mismo no se sabe cómo va a reaccionar el tobillo hasta el final de temporada, pero ya se verá.

No me quiero imaginar con qué dolor habrá llegado a jugar...

-Lo hablaba con mi familia. He sufrido mucho y creo que muy pocos partidos habré jugado a mi 100% de verdad. Es verdad que la mayoría de jugadores siempre juegan con algo de dolor o alguna leve lesión. Hubo una época en la que no había casi descanso con la Europa League y he sufrido, pero me ha servido para ver que aun sufriendo he sido capaz de estar en el campo, de ayudar al equipo. En octubre o noviembre me centraba más a seguir con la racha positiva que al dolor de tobillo.

Y lo de la costilla...

-Sí, luego me pasó lo de la costilla en Cádiz y contra el Villarreal en casa el cuerpo dijo basta. En Holanda pude jugar con mucho dolor pero contra el Villarreal aguanté 45 minutos y luego estuve jodido: no podía ni tumbarme, ni sonarme los mocos€ Era imposible. Y luego de nuevo el tobillo. Es verdad que he sufrido mucho, pero me ha servido para aprender, madurar y darme cuenta de que en ningún momento me he venido abajo y he querido darle la vuelta cuanto antes.

Pero es el líder de la zaga y está entre los once que más ha jugado.

-Pero no he jugado tanto como me hubiese gustado por el tema de las lesiones. A mí lo que me importa es estar disponible, ya sea para el banquillo o el once. Venía de un año de muchas lesiones musculares, la conmoción en la cabeza y la rotura del ligamento. Tenía mucha rabia, pero empecé la Liga bien, jugando todos los minutos y el cuerpo me dijo basta y no me ha permitido estar todo lo que me gustaría. Es verdad que cuando he estado disponible el míster ha contado conmigo y de eso estoy muy contento.

Qué pasa con sus goles, con lo que le gustan... No le habrá caído una maldición por estrenar el nuevo Anoeta

-A ver (risas). Siempre había sido de meter algún golito, pero el año pasado me tuve que conformar con alguna asistencia que Nacho me sigue recordando y que me dice que me la devolverá, y este año tampoco he tenido muchas ocasiones claras. No sé si será la maldición del primer gol del nuevo Anoeta, pero es verdad que la gente me lo recuerda. Llevo tiempo sin meter y claro que se me pasa por la cabeza, pero lo que tengo que hacer es evitar goles y, si luego puedo sumar alguno, pues de maravilla.

La Real tiene un proyecto referente en la Liga...

-Empezamos con un juego muy atractivo, la gente incluso veía nuestros partidos; hemos sabido jugar de diferentes maneras y el proyecto es muy serio, con mucha gente de la cantera. Además los que vienen de fuera lo hacen para sumar, ayudar y son conscientes de lo que es la Real. Nosotros intentamos plasmárselo para que se sientan como en casa y muchos te pueden decir que se siente de la Real. Tenemos una base en Zubieta que saca mucha gente pero los de fuera suman muchísimo

34 años son demasiados. ¿La Copa es el inicio de algo?

-Hemos sido capaces. El tiempo dirá si podemos optar a algo mejor o no, pero es lo que quiere este. Ganar la final al Athletic no se nos va a olvidar nunca, se va a quedar para el recuerdo para toda la vida.

Firmará ya ser quintos...

-Claro. Creo que llevamos muchísimo tiempo en esas posiciones. Betis y Villarreal no van a fallar mucho y tenemos que sumar de tres en tres. Pasará lo que tenga que pasar, pero vamos a ir a por ese quinto puesto y vamos a seguir siendo tan ambiciosos como hasta ahora.