- La planificación de la próxima temporada ha dado un giro radical después de este descafeinado epílogo exprés de la Liga. Justo antes de su comienzo el presidente de la Real, Jokin Aperribay, manifestó en una entrevista concedida a su periódico local de cabecera que se estaban planteando la posibilidad de no hacer fichajes este verano para reforzarse solo con parte de los siete cedidos esta temporada. Un mensaje que se sumaba al que hizo pocos días antes el director de fútbol del club txuri-urdin, Roberto Olabe, bastante poco factible en el fútbol de hoy en día en el que se ha Mcdonalizado todo.

Después de la agonía que se sufrió para certificar la clasificación para la Europa League y no para la Champions, objetivo marcado en la vuelta a la competición, todo ha cambiado mucho. La prueba estuvo en la rueda de prensa que ofreció Imanol Alguacil para hacer balance de la temporada una vez acabada la misma: "El rendimiento de los chavales ha sido bestial, pero sabemos lo que cuesta tener una regularidad y que mantengan ese nivel ante torneos tan potentes si queremos competir de tú a tú. Vamos a valorar bien para poder seguir siendo nosotros, la Real de cantera, con buenos refuerzos que aporten para poder ser competitivos. Si algo tiene este club es la cantera y hay que apostar por ella, pero eso también supone un riesgo. Y si eso lo tenemos claro... Soy el primero en creer que se puede, aun sabiendo que los jóvenes necesitan momentos de calma, porque no es fácil subir y mantener un nivel top de principio a fin. Y eso nos puede costar caro el año que viene. Que los jugadores tengan contrato no significa que vayan a seguir".

Esta última frase lo resume todo. Como viene siendo la tónica habitual en los últimos veranos, la planificación de la próxima temporada va a estar marcada por las posibles salidas de Diego Llorente, Willian José y Adnan Januzaj. Aperribay declaró en la misma entrevista que no necesitan vender: "Rotundamente no. La Real va a notar la crisis, porque ha llegado en un momento importante como es la remodelación del campo de fútbol, pero, por suerte, tenemos la economía ordenada y un equipo joven con futuro con inversiones importantes". Pero no parece nada claro que vayan a seguir, porque los tres jugadores han manifestado en los últimos meses su clara intención de no continuar.

Llorente es el realista que más opciones tiene de afrontar la rampa de salida. El central madrileño, que ha terminado bien la temporada pese a sus habituales lunares negros y que cuenta con la confianza de Imanol, considera que, a sus 27 años (los cumple el próximo 16 de agosto), es el momento ideal para dar otro salto en su carrera. Tanto sus compañeros, que en varias ocasiones le han hecho ver que como aquí no va a estar en ningún lado, como desde el club le han tratado de convencer, pero el canterano del Real Madrid siempre ha sido muy ambicioso. Si el pasado verano no se marchó fue porque acababa de ser padre y si no lo hizo en las últimas horas de mercado al Mónaco fue porque la Real se quedaba en cuadro. El equipo monegasco, que se encontraba en la pole position para hacerse con su fichaje, probablemente se ha retirado de la puja tras la destitución de Robert Moreno.

El entrenador catalán era su gran valedor, como demostró llevándole a la selección cuando no estaba en su mejor momento. El hecho de ser internacional le sigue dando un caché importante para intentar hacer caja. Así las cosas, tiene pinta de que se va seguro y la Real lleva tiempo moviéndose para traerle un sustituto de garantías y de rendimiento inmediato.

El tema de Willian José es delicado. El brasileño cometió el peor error que se puede tener en la Real, que es borrarse de un partido, además de vida o muerte, como el del Espanyol en la Copa. Desde ese momento Imanol se empeñó en recuperarle para la causa como fuese hasta el punto de que, a pesar de no recuperar su nivel anterior, lograse goles importantes como ante el Espanyol y el Villarreal: "Este año tuvo un episodio al que logró darle la vuelta. Ha puesto de su parte. Todos hemos empujado para que estuviera con nosotros y hemos sido capaces de meterlo y nos ha ayudado a lograr el objetivo. Estoy súper contento y orgulloso porque ha logrado darle la vuelta a la situación".

Aunque sus palabras sonaron convincentes, lo cierto es que la actitud y algunas ocasiones claves falladas han dejado dudas sobre su futuro. Willian tenía muy claro hace unos meses que su etapa en la Real había finalizado y, como dice Olabe, "si a alguno se le pasa por la cabeza irse es que ya se ha ido". En un mercado que se va a tener que apretar el cinturón y en el que ningún club va a hacer ninguna locura, un delantero centro que ha marcado once goles continúa siendo un objetivo codiciado.

La dirección deportiva de la entidad realista se ha movido para dar con un sustituto e incluso podría tener las gestiones muy avanzadas con algún jugador, por lo que si llega una buena oferta, la estudiarán y quizá sea la mejor solución para todos.

Y luego está Januzaj. El belga se fue de vacaciones como a él le gusta. Con capa de superhéroe tras marcar lesionado el gol clave para entrar en Europa y valorado y reconocido por la afición. El problema es que a la hora de hacer balance y, aunque haya tenido un mayor protagonismo desde enero, no se puede considerar titular absoluto. Antes del mercado de invierno repitió a diestro y siniestro en Zubieta que se marchaba seguro. Su gran inconveniente es que, a pesar de su calidad indiscutible, pocos equipos le van a considerar prioritario, por lo que no estarán dispuestos a ofrecer demasiado dinero.

Y para malvenderlo, como es normal, la Real prefiere amortizarlo en el campo. Y eso que su carácter especial provoca un gran desgaste a Imanol, como lo confirmó públicamente él mismo con el famoso ejemplo del órdago que se marcó al final de la Liga al decirle que si no entraba en la lista contra el Sevilla no viajaba a Madrid. Si contó eso a los medios, lo que no hará de puertas hacia dentro€

En principio, el club cuenta con él y en las negociaciones para renovar a Merquelanz nunca ha utilizado el argumento de su posible marcha para convencerle y darle una mayor seguridad en el aspecto deportivo.

Olabe ya exploró el fútbol oriental. El 5 de julio de 2003, cuando la afición txuri-urdin todavía no se había secado las lágrimas por el título perdido en la penúltima jornada en Vigo, una noticia hizo olvidar de un plumazo la campaña del subcampeonato: "La Real ficha a Lee Chun Soo". Es curioso, porque muchos de los seguidores blanquiazules pueden recordar el momento en el que se enteraron casi de la misma forma que lo hacen con momentos claves históricos de su equipo. El director deportivo del club donostiarra por aquel entonces era Roberto Olabe, quien consideró que era un buen momento para explorar el mercado oriental. Al exportero siempre se le ha considerado como una persona muy internacional y con un gran control de todos los mercados. Con el posible refuerzo de Kate Kubo sabe que abrirá una puerta importante, ya que en Japón se sigue mucho el fútbol y tendría mucha más repercusión todo lo que hiciese el equipo. No hay que olvidar que el madridista es la gran esperanza del fútbol nipón. No en vano, ha sido ya siete veces internacional con su selección, con la que disputó la pasada Copa América, y en la que acabó erigiéndose en la estrella de su combinado, con el que debutó con 18 años y cinco días. Por algo les gusta denominarle el "Messi japonés"...