- “Soy entrenador. Me considero entrenador”, señala Beñat Labaien, con experiencias como técnico en las canteras de Atlético de Madrid y Real Madrid, y en cuyo currículum también figuran etapas en Fuenlabrada, Elche y Leeds United, dentro ya de un contexto de competición profesional. Ahora, en cualquier caso, ejecuta tareas más centradas en el análisis, figurando en una estructura general “no amplia en cuanto a número pero sí muy bien organizada”. “El entrenador, desde su situación, sabe delegar y al mismo tiempo limita bien nuestros roles. Y, ya más a nivel de club, el director de fútbol, Roberto Olabe, cree mucho en ese trabajo de análisis, que viene impulsándose en todos los departamentos de la entidad”.

Definido su rol en materia técnica, Labaien explica también cuál entiende que debe ser su rol en la relación con los futbolistas. “Presenciar los entrenamientos propicia cierta cercanía con el jugador. Pero no debe implicar ningún tipo de jerarquía sobre el mismo. Los analistas no debemos buscarla. Creo que hacerlo supondría un gran error. Nuestra figura tiene que ser, sobre todo, discreta”.

Esta intención no quita, en cualquier caso, para que Labaien se sienta partícipe de los éxitos del equipo y mire ilusionado al horizonte. Preguntado por el partido que le gustaría haber preparado y analizado, se queda con “uno que no se ha jugado todavía”. “Me refiero a la final de Copa. Esperemos que primero se solucione el problema sanitario que tenemos en todo el mundo Y, a partir de ahí, esperemos también poder jugar el partido. Si es con público, mucho mejor”.